/34 charlas con Edmundo Reyes – Parte 4

34 charlas con Edmundo Reyes – Parte 4

La exactitud de estos datos es fácilmente comprobable y están a la mano de cualquiera que se quiera acercar por la biblioteca San Martin y pedir el libro “Historia oculta de personajes poco conocidos de Mendoza” de Arcidiano Marinó, editorial Carida, ¿19?

Cuando se cae la venda de los ojos, es difícil volver a colocársela sin pensar en lo que se vio (algún mendocino distraído con aires de filósofo).-

El pañuelo al cuello dejo de ser moda para vestir al ridículo y el sombrero ya no es prenda de todos los días. El sobretodo es lujo de la oligarquía (esa que anda en autos alemanes, usa perfumes franceses y tiene plásticos estadounidenses) y salvo en los bancos la corbata no es indispensable para verse bien (exímase a algún contador o abogado chapado a la antigua). Comprarse unos gemelos es motivo de gracia y el pañuelo solo sirve para cubrir la cabeza los  jueves. Un tipo con el pelo largo y una mujer rapada. Un pibe que anda de la mano con un pibe y una pendeja besando al novio en la puerta de la casa. Una señora que pasa los cincuenta vestida como una señorita de veinte. Un hombre que lleva al bebe en brazos mientras la mujer le saca las llaves del auto por que ELLA va a conducir.

Una mujer se divorcia y conoce un tipo que a los dos meses ya esta viviendo con ella. El hombre no solo trabaja si no que también se hace un tiempo para llevar a los chicos al colegio, por que la esposa labura todo el día.

Ni que hablar del cuero, con el precio de hoy es preferible comprarse un carro que garparse una buena campera.

-Ayer pase por el negocio de Don Pedro y vi una persona que gritaba y se reía como si le estuvieran contando una increíble historia, cuando me acerque bien vi que estaba hablando por un teléfono sin cable y cuando llego a la caja me encuentro un pibe, tarareando no se que canción en ingles con unos cables enchufados en los oídos. Cuando salgo del almacén me di cuenta que al lado pusieron un local con un montón de televisores con maquinas de escribir.-

-Computadores….

Como sea que se llamen, todos mirando el suyo sin saber que es lo que pasa alrededor. Además  todos sentados horas y horas frente a la caja esa que yo no se que es lo que le encuentran de divertido.-

Las plazas vacías de lunes a lunes y el parque, el domingo junta más automóviles que personas. Cualquier día es bueno para salir de parranda y nadie dice nada si una mujer fuma.  Un mocoso le grita al padre que lo mira con cara de indiferencia y una nena de apenas quince años esta embarazada.-

Cuando Arístides Mercado se alejo, después de hacer su clásica demonización de la época actual, le pregunte a Edmundo Reyes

-Don Edmundo ¿antes se vivía con más alegría que ahora?

Edmundo Reyes me miro con desidia –Ahora se sobrevive no mas pibe.-

-¿Y antes?

-Tambien.-

Una pastilla que te quita el sueño, otra que te da. Una píldora que te calma los nervios y otra que te mantiene despierto dos días seguidos, un cigarro que te hace delirar y un polvito mágico que te lleva hasta el cielo y después te tira desparramado en el infierno, un algo que te da algo y un nada que te da todo, un…un…un…

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