¡Hola queridos! Se viene la fiesta número siete del mendo ¿y qué mejor que ir preparándonos con una nota nostálgica sobre los boliches que hicieron historia en Mendoza?

Vamos a dar un ranking, pero sin distinguir los mejores y los peores, porque para nosotros marcaron una noche especial, ya que significaron un histeriqueo con el pibe que te gustaba o un chapecito en el rincón, salidas masivas que eran el rejunte de gente e iba el amigo del amigo de tu amigo, y de paso, se pasaba algún filito con alguno de los pibes vía mensaje de texto que decía: “¿Vas a Omero hoy?”. Comencemos el conteo:

La Luz Matinee

Primera matinee para los nacidos en los 80. Los más pillos se iban en bondi, a los ñoños los llevaban los viejos. Filita de rolingas en la puerta, pibas fumando a escondidas. Época de altos flyers que eran repartidos en el centro y los bananas los pegaban en la carpeta del colegio. Pulseritas con nombres de marcas, Sombras, La Bush, El Símbolo, Babasonicos y La Bersuit tocando los domingos. Primeros “trances”, primeros pedos, primera humedad en la entrepierna.

La Morena Matinee

Cómo no recordar el olor a panchito o hamburguesa y la gaseosa a $1, ah, y el kiosquito para comprar el Pico Dulce, la sombra al estilo mapache, los pañuelos rolingas y las primeras apoyaditas, cada vez que ibas te encontrabas a la puritana del colegio chapando fuerte en el rincón y temazos tipo “Ven Bailalo”, “Pobre Diabla”de Don Omar, “El Teléfono” de Wisin y Yandel o “Dale Caliente” de Daddy Yankee, también sonaba “Baila Morena” de Tito El Bambino y cumbianchas de Damas Gratis, Nestor En Bloque, Repiola y cuartetazos de Los Playeros o Banda XXI… Era la salida esperada, era la primera vez que pisabas un “boliche”, ya eras todo un adolescente hormonal, al cual caían a buscar a las 2 am y si tenías mucha mala suerte, te llamaban por el micrófono y nunca nos olvidemos de esa voz que decía “Bienvenidos a la La Morena Matinee”

Omero

Y llegamos a las épocas de jopo, collar de pelotitas y strapless con jeans, la falsificación de documentos y las toreritas con -10ºC, los primeros piercings, las cubatas y los flequillos rolingas, los cinturones que te hacían menos cintura que un paquete de yerba con la musculosa vestido que hacía juego con el jean o la calza. No olvidemos que se salía con $10 y sobraba plata, los pedos en el patio con la lujosa vista a la city mendocina… Los choris a la salida, infaltables. Habían pistas para todos los gustos, en la de Rock te pasaban “La 25”, Callejeros, Los Redonditos, Los Jóvenes Pordioseros, Viejas Locas, etc.

En la de cumbia te pasaban hitazos de Damas Gratis, Supermerk2, Yerba Brava, El Polaco, Eh!!! Guacho, Los Playeros, Banda XXI, Rodrigo, Walter Olmos, Leo Mattioli, mientras que en la pista de electrónica sonaba Satisfaction, Fascination o Some Velvet Morning.

No nos olvidemos de las fotos que salían en la página de omeroweb.com

Nonquen

El dueño le había vendido el alma al Diablo… eso era indiscutible, ¡pero que boliche señores! Era una herradura que se asemejaba al estrato social menduco. Hacia la izquierda tenías cumbia, pelo largo y mojado y mucha camisa Gregoris. Hacia la derecha se iba elitizando (¿que ironía no?), teminando con la primer “vip vip” (si… doble vip) mendocina. Donde entraba el dueño del boliche, dos o tres high society menducos y uno que otro famoso. La entrada salía $15 pe y te daban 5 consumiciones, que iban desde un trago y una lata de cerveza, hasta un pancho o café… hoy con 15 peso’ no te hace’ ni un alto guiso.

Garden

Como olvidarnos del gran Garden, tenías un popurrí de música y de gente, la birra de 1 litro a $2, los chabones que te pedían entrar en pareja, los veranos ahí eran la gloria y valía la pena usar strapless con un súper bronceado, zarpado quincho era.

El perreo de esa época era con “Perdoname” de La Factoria, “Pose” de Daddy Yankee o “Llamado de Emergencia”, ni hablar de las clásicas cumbianchas de Damas Gratis, Yerba Brava o los cuartetazos.

Kamikaze

¿Se acuerdan de la vip en la que entrabas trepándote mientras medio boliche te veía el calzón (Si es que ibas en falda)?, la adrenalina de que el patovica no te viera… Ahí empezaron las previas, los after, los remises truchos para que te saliera más barato todo, bailar temazos como es que decía “Re re re reggaetón, sha sha sha shake it up”, “Me estas Tentando” de Wisin y Yandel, “Diva Virtual” de Don Omar y algunos más.

Voodoo

En la cima de La Puntilla se encontró uno de los mejores boliches (para mi gusto), la cédula provincial trucha, o los documentos de los hermanos garpaban bastante, el taxi desde Palmares para gastar menos, los zapatos altos en las calles de tierra, los combos de Speed con Vodka, ver chicos más grandes y mover el poto con temas tipo “La despedida” de Daddy Yankee, “Prrum” de Cosculluela o “Danza Kuduro” de Don Omar, infaltables los temas del Mc Caco, La liga, La Champions Liga o Karina.

La topetitud la alcanzabas cuando salías en las fotos de Revista Oliva o Mdz Club y ni hablar cuando conseguías free. Los viernes era para gente más grande mientras que los sábados era para mas pendejos.

Cariló

Los veranos en Cariló eran lo mejor del mundo, repleto de gente, la cola de los autos llegaba hasta el Santuario de Lourdes, era el momento de ir cuasi en bolas porque te cagabas de calor, uno de los boliches que la rompió en su momento, las luces, los shows, ir era todo un acontecimiento.

Al Sur

Mansas noches, daba para el invierno, verano, lluvia, calor, lo que sea, había que ir bien producida así no te hacían quilombo para entrar, parecías Bambi recién nacido caminando con zapatos altos, el auge de las faldas tiro alto y el afano monumental de tragos ajenos para poder subsistir el resto de la noche, la pista de electrónica que se llamaba ClubSound traía a mansos dj y te quedabas mendigando transporte a las 6 am.

Runner

Cuando el mito de que en Omero te pinchaban con agujas con Sida (¡de no creer!) todos comenzaron a ir a Runner, primer establecimiento que apostó por la música electrónica (visionarios). El lugar era pituco y elitista, se quedó con lo mejor de Omero, mientras la “borra” se esparcía por antros de mala muerte dispersos por Chacras. Un lugar como la electrónica… bonito, pero oscuro, siniestro, atestado de gente coqueta pero rara, mujeres robot, muñecos adornados, alta alcurnia menduca y música atronadora. Iba y venía la moda de este lugar, pero siempre fue fiel a la electro.

Apeteco

El histórico, el grande, abierto de miércoles a domingo, locura total, era para tramposos y “gatos”, el Angelito ultra bronceado que te dejaba entrar a cualquier hora, el “Papanamericano” que sonaba de fondo y cagandote de calor y después empezaba a sonar un “Jurabas tu” de “Los de fuego”, siempre había algún viejito que te garpaba algún trago.

Terminó clausurado, te extrañamos Teco.

Al Diablo

Uno de los más viejos y queridos por la gente, un boliche gigante donde te tocaban el culo bastante seguido, en las épocas añejas tocaban bandas como Boka Negra (covers de Soda Stereo) o si nos vamos mucho más atrás iba hasta Cesar “Banana” Pueyrredón. Se iba en trafic y te juntaban con otros grupos, la vip era una gran pecera con salida al patio y generalmente se caía con las promotoras de Miami Sun para entrar gratis, el esperma de pitufo abundaba para ponerse en pedo, aunque las más recatadas tomaban Gancia batido con limón

Aloha

Si te gustaba el rock, si eras alternativo, si lo tuyo era el under… Aloha era para vos. Boliche tomado por emblemáticos barrios de Mendoza, como el Unimev, el Covimet, el Ujemvi, el Bombal, el Cementista, Dorrego, etc. Todos los rolas iban a cacarear al ritmo de Los Visitantes y mucha Ricota. Pocos sabían que las mejores minas iban a ese boliche, porque la onda era estilo “fiesta electrónica”… nadie te rompía la pija. Eso si… el descontrol alucinógeno que acontecía en los baños no lo paraba nadie.

El Cacano

Nadie sabía cómo ese antro podía estar habilitado… o mejor dicho, todo sabíMERCAAAAA pero a nadie le importaba. ¡Qué lindo era tener la certeza de que a la hora que fueses ibas a poder entrar y nadie te iba a romper las bolas en la puerta! Se llenaba de raros, de chetos de Chacras, de rugbyers y de rolas conchetas, ¡per oque baile señores! ¡Que baile se armaba! Un día podías entrar y tenerlo a Charly García tirándose unos solos en piano… una cosa de locos. Grandes romances sucedieron en ese extraño lugar del corazón de Chacras de Coria.

Geo

El más añejo de la San Martín Sur, las previas en la Octano y el panchito a la salida, los chamuyos tipo: “Mami, me voy a dormir a lo de una amiga” y te escapabas para ir los jueves porque sabías que se re ponía y te encantaba porque te sentías rebelde, después te las arreglabas tomándote el Trole hasta la raja y terminabas yendo al colegio con alta resaca hasta quedarte dormida en el banco. Que buenas épocas donde todo chupaba un huevo.

Este es el primer conteo, se viene el segundo y quiero que vos propongas que boliche debería estar y tu mejor anécdota, y andá preparándote porque el 15 de octubre nos bailamos la vida en Al Sur. Espero que se les haya movido el baúl de los recuerdos y nos vemos la próxima.