Siento tibio y frío, debo haberme quedado dormida para ir a trabajar ¿Es la mañana? ¿O todavía es de noche? No lo sé, deberé abrir los ojos para averiguarlo, cuesta tanto, creo que no puedo,…
Las mejores nota de Diem Carpé durante el…
Vengo de la media/vieja escuela de mendolotudos, mirando con nostalgia a algunos que ya no están y sintiendo orgullo por aquellos otros que ya a esta altura son leyenda. Hace un año y medio, justo…
Los cuentos de Diem: La epifanía del fin…
La noche devora sin perdón todo lo que alrededor toca, y hace varias horas que ya engulló este páramo que conozco como mi hogar. Traté de que las últimas horas pasaran como si nada, pero…
Los cuentos de Diem: La excepción de la…
Dicen los sabios que cuando algo pasa de forma inédita y abrupta en nuestro ser, la mente tiende a olvidar esa escena en específico. Vamos a querer remontarnos en las crónicas de la conciencia, pero…
Los cuentos que Diem cuenta: Retrato de un…
No voy a contarles lo que sucedió después. No voy a adentrarme en los pesares del cuerpo, pero si en los pesares del alma. Porque a veces el sufrimiento de nuestro adentro, es más fuerte…
Los cuentos que Diem cuenta: Es como un…
Salgo a caminar porque no me queda otra cosa que hacer. Estoy buscando una razón para sonreír. Experimento la mediocridad en su máxima expresión: el sentirse mal sin sentido valido alguno. Tal vez me dejé…
Los cuentos que Diem cuenta: Llamada de madrugada
No voy a mentirles, esta nota está escrita con total veracidad. Rompe, tal vez, con todos los parámetros a los que los tengo acostumbrados. Son las 2:57 de la mañana, recién después de un largo…
Los cuentos que Diem Carpé cuenta: Nuevas Huellas
Nos sentábamos en la vereda a pasar las horas. Nos quedábamos reposando, creyendo que el factor tiempo no se acordaba de nosotros. Creíamos inocentemente que el futuro era para los “grandes”, algo que no llegaba…
Los cuentos que Diem Carpé cuenta: Mañana sabrás
Domingo. Es tarde en el complejo de departamentos donde habito. Me senté frente al escritorio. Saqué una hoja en blanco y sin titubear demasiado, dejé que el lápiz destiñera el papel. Porque hoy pienso escribir…
La corazonada más cruel: El adiós a Celso…
Despierto de golpe y acelerado. Salgo por la puerta de casa con prisa y decidido. Esta vuelta sé con exactitud adonde ir. Mientras camino apresurado, le doy vueltas al asunto de seguir una corazonada. Es…
La teoría del reloj
La noche está fresca; y no es que se sienta el clima así dentro del bar, pero mi campera recostada en el respaldar de la silla me reafirma la deducción. Paso la mano por mi…
Dejó sólo una foto
Su labor de hoy consistía en buscar unas boletas ya pagadas hacía muchos años atrás. Una tarea cotidiana que a todos nos suele chocar. Los pasares del día a día le pedían esos papeles del…
Recuerdos Repentinos: Corten, se imprime
Justo en la radio tenían que tocar esa canción. ¡Sabes de lo que te estoy hablando! Esa canción que hace que en tu mente, todo parezca un video musical. Es que la TV nos cagó…
Cambios
¿Así que hoy me estás leyendo? Entonces déjame decirte que tu conciencia está a punto de activarse, y que hoy piensa hacerte cambiar. No es por mí. Créeme que es por ti. Piensa llevarte a…
Una Noche en la Ciudad
La noche acababa de llegar, y el albor solitario del bar me descubrió en la centro de la ciudad. Sentado solo en el medio del salón, sosteniendo un vaso de cerveza fría y transpirada entre…
Habla conmigo
Recuerdo bien que me encontraba sentado solo, esperando que la nada se acuerde de mí y pase a recogerme. Recuerdo bien como me sentía, porque pocas veces me sentí como aquella vez. Es que hay…
Hace un tiempo
Te sentís tan chiquito al lado de las enormes manecillas de ese reloj, que te corre cada segundo más rápido. Y hay enormes riesgos en cada milímetro que esas agujas viajan. Porque hoy estas así,…
El hombre de ningún lugar
¿Me decís que podes vivir en el libertinaje por siempre? ¿Así que decidiste seguir tu estúpida filosofía de vida? Mira vos que bien. Pues discúlpame que te diga, yo no te veo así. Se lo…
Destino: Desconocido
Sé que no soy el único que debe sentirse apabullado por el destino. Porque mire donde mire, uno ve los juegos de este odioso factor funcionando a la perfección. Podes autoconvencerte y decir que no…