/Arjona, el último “machirulo”

Arjona, el último “machirulo”

Bueno, antes que todo debo decir que me tomé el trabajo de buscar la palabra “Arjona” en el buscador de la página del Mendo, y hay varias notas del Dr. Bomur, en las que lo defiende a morir (leer este papelón!).

Investigando un poco mas descubrí  que tiene un tatuaje que ocupa toda su espalda con el rostro del guatemalteco, además tiene la oficina empapelada con posters de este exitoso cantautor y que se puso Richard (Ricardo) en su honor.(*)

*Todo esto puede no ser cierto.

Vamos a lo que traje Lince, “el último machirulo”, no es con intención de heroificarlo, así como el «último samurái»,  no al contrario, es para establecer que ojalá sea el último, ya que entiendo que el tipo es de otra generación y su público también.

Pero si lo ubicamos en esta nueva generación, millennial, en la que nos ofendemos con facilidad, y ya no toleramos estos mensajes que refuerzan estereotipos negativos, tenemos para hablar y hacer dulce de alcayota, un asco.

Oriundo de Guatemala, Ricardo, le habla a la mujer de casa, a las madres, a las solteronas. ¡Pero de qué manera! Te ejemplifico:

Me gusta verte hablar de la cocina
Con la seriedad que Gorvachov aborda el tema
De la caída de su cortina

Me gusta verte remendar mi pantalón
Que hubiese ido a parar a la basura
Si hubiese sido otra la situación.

Me gusta verte en el supermercado y tu swing al caminar
Y tantas otras cosas, pero mas me gustaras,
Cuando alguien te llame: mamá

Buenísimo, mujer a la cocina, haciendo las compras o cuidando las bendiciones, loco sigue llenando estadios este tipo, que onda, no lavó un plato en su puta vida y a sus hijos los sigue, pero desde instagram, eso me da a entender.

Otra joyita de Arjona es la letra de “Dime que no”..

Si me dices que si, piénsalo dos veces
Puede que te convenga decirme que no
Si me dices que no puede que te equivoques
Yo me daré a la tarea de que me digas que si

Aplausos para el muchacho, admitiendo que es un tremendo tóxico, violento e insistente, es litetalmete un canto a la misoginia.

Pero el premio Oscar a la ordinariez, es la conocida “De vez en mes”

De vez en mes con tu acuarela
Pintas jirones de ciruelas
Que van a dar hasta el colchón

De vez en mes un detergente
Se roba el arte intermitente
De tu vientre y su creación

Si es natural cuando eres dama
Que pintes rosas en la cama
Una vez de vez en mes

Acá, el barrilete cósmico guatemalteco, toma un papel mucho más oscuro y desagradable, hablando de la menstruación, de cómo manchan las sábanas y generalizando como les cambia el humor a las mujeres en este proceso mensual.

Bueno podría poner 50 letras más, pero creo que ya marqué mi punto, no me quiero ir sin dejarles un compilado del método favorito de composición de Arjona, las analogías pedorras contradictorias, es su fuerte, chequeá:

“acompáñame a estar solo”

“el problema no es el problema”

“como deshacerme de ti si no te tengo”

“como alejarme de ti, si estas tan lejos”

“el mojado tiene ganas de secarse”

«Como encontrarle una pestaña a lo que nunca tuvo ojos»

¡Geniooooo! ¡Cerrame la 4! ¡Denle a ese hombre los 10 mil dólares!

Poco a poco irá perdiendo seguidores y le lloverán bombachones de viejas en modo de gigantes paracaídas cuando se presente en vivo hasta desaparecer.

Bueno, a pesar de sus inmundas letras, el tipo es músico, y no puedo reprocharle que tiene lindas melodías y una voz potente y privilegiada.

El problema no es el problema.

El problema es prestarle atención.

Ricardo Arjona.

El último machirulo.

ETIQUETAS: