Estas letras las escribo desde mi cama, sola y pensando en tu boca. Esperando que algún día puedas leerlas, y me digas que me querés sin ropa retorciéndome de fuego sólo para vos, una vez más. Rogarte que me cojas, sin antes, pedirme que te diga al oído, lo mucho que me calentás… sé que te gusta.
En la ducha tibia, mis dedos te buscan y me tocan tal cual lo hiciste.Todavía siento tu lengua jugar entre mis piernas, mis tetas, y mi cuello. Mis uñas arañando tu espalda y gimiendo de placer en ese momento culmine en que exploto por vos.
Quiero ser tu puta francesa y que hagas de mí, lo que vos quieras. Pegame, marcame, tirame el pelo y mojame, entera, contra la pared.
Desvestime, mordeme, dale, que me encanta como lo haces. Decime todas las cosas sucias que se te vengan a la mente, cada vez que me tenés en frente. Me excita este secreto prohibido, porque me volves loca y repleta de lujuria. Sos el pecado más adictivo que tuve.
Quiero atarte a esa cama blanca y lamer cada espacio de tu cuerpo. Jugar con vos, y que estés dentro mío una y otra, y otra vez.Me muerdo los labios y cruzo mis piernas al recordar cómo me recorriste, sin dejar espacio por descubrir.
Arrancame la tanga con los dientes y dame vuelta en un segundo. Quiero ser tu sumisa, tu esclava, tu alumna, y tu secretaria empapada de sexo.
No me sigas teniendo en tiempo de espera, que ya estoy sintiendo los efectos de la abstinencia de vos. Buscame, no te vas a arrepentir. Puedo ser muy pervetida por culpa tuya.
Escrito por Rocío para la sección: