/Me cago en la década del 90 (primera parte)

Me cago en la década del 90 (primera parte)

Realmente existen infinidades de notas adorando a la dulce década del noventa. Ese hermoso 1 a 1, pizza con champagne y los mejores años de nuestras vidas. Pero como siempre pasa, creamos en nuestra mente un montón de recuerdos confusos que hacen parecer añorarlos con ternura y dulzura, cuando en realidad les aseguro que muchos de nosotros pensaría dos veces volver a pasar cosas como estas:

Boston Medical Group, problemas de erección y almuerzo familiar

Todos recordamos esa inusual publicidad donde desde chicos, incluso mucho antes de saber que es una erección, ya te vaticinaban que iba a ser un gran problema para vos, tu virilidad y la fidelidad de tu pareja. Y que no tenías porqué preocuparte, ya que un grupo de expertos estaban ansiosos esperando tu llamada listos para solucionar el problema de tu vida. Mas allá de esto, recuerdo infinidad de veces estar almorzando o cenando en familia, viendo «Locos del Aire» o «Arma Mortal 2» y de repente ver cómo un tipo en bolas se le aparece a una chica que estaba en una pileta mientras le tira una su malla y la ataja con el miembro viril erecto. Ideal para compartir un domingo a las 14hs.

Internet

La tecnología y el futuro había llegado a tu casa, pero lamentablemente de una forma muy arcaica y lenta. O hablabas por teléfono o te conectaba a internet. Si querías bajas una foto, podías esperar un 5 minutos hasta que se terminara de descargar y des – pixelar. Cada vez que te conectabas, sonaba así:

Si querías ir mas allá y convertirte en un verdadero pirata y descargar mp3´s, cada tema podía demorar una hora, y si de repente querías bajar el video clip de los VengaBoys, quizás podía llevarte toda la noche.

Pornografía

Hoy en día obtener pornografía es más fácil que ver a boca abandonar de local, pero en aquella época, o bien descargabas unas 6 fotos de internet en el lapso de un mes (existía un miedo infanto – juvenil devenido en mito que decía que en la factura de teléfono te aparecían las páginas que visitabas, imaginate si tu viejo se enteraba. Estabas frito angelito.) o la otra opción era conseguir una revista prono. Revista que pasaba de mano en mano, casa en casa, covacha tras covacha y que al cabo de un par de semana, su plastificado natural y acartonamiento resultaba imposible poder disfrutar de ella.

Video juegos

Los más pobretones nos teníamos que conformar con el Family Game, y los que mejor la pasaban disponían del SEGA o Nintendo. Ni hablar de los arcade, que ponías una ficha y durabas menos que boca sin abandonar de local.Algunos juegos eran mejores que otros, pero la posta era poder continuar las partidas. Era poco común guardar partidas. Y ni hablar del televisor. Estabas entre perderte ALF si querías jugar al Mario o que tus viejos te retaran porque esas cosas, según decían, quemaban los televisores.

 

Para terminar esta primer parte les dejo una publicidades que detestaba cuando las pasaban en la tele.

ETIQUETAS: