Mis queridos lectores, varios fueron los motivos por los cuales me decidí a escribir este ensayo de autoayuda. Cuando se los comente uno por uno, entenderán porque (tal como afirmaba Einstein) nada es azar en el universo.
A continuación pasaré a enumerar las distintas situaciones a las que me vi sometido:
1. Ayer pase por una concesionaria de autos a mirar la exposición y de pronto un vendedor se me acercó y me dijo refiriéndose a las características de la caja: – “… ¡y encima tiene caja de secta!”
2. Por la tarde, en la casa de unos parientes, uno de ellos comentó acerca de la legendaria serie Lost: – “… ¡y eso que llegó a la temporada secta!”
3. Un rato más tarde el cafetero ambulante de la calle Mitre enfrente de los tribunales me comentaba: -“¿Jefe, se enteró adonde fue el choque?” – No, ¿adónde? – “en la calle Chaco, …!en la secta!”
4. Levemente asustado, entré a un supermercado de la calle Colon y un pendejito disfrazado de picadura de abejas me miraba misteriosamente mientras la madre le comentaba a su amiga: – “…pobrecito, lo lleve al médico porque le picaba, y me dijo que era… ¡la secta eruptiva!”
5. Cerca de las 21:30 hs., recibo una llamada de mi amigo el músico que quería comentarme una anécdota reciente en un toque de bar: “… y entonces estaba tocando rasguña las piedras y… ¡se me cortó la secta!”
6. Pero la gota que colmó el vaso fue en el colectivo de regreso a mi hogar, donde un adolescente le contaba a su amigo: -“… y cuando llegue a la ultima me temblaba la mano loco, ¡era la secta tota!”
Habiendo escuchado a todos y a cada uno de ellos, comprendí que todo el conjunto era una señal proveniente de la divinidad y entonces me decidí a no desaprovecharla y volcar esta iluminación en…
Consejos para armar su propia secta religiosa
Antes aclaro que no me conmueven si santos ni pecadores, pero cuando viene alguien y transforma un maní salado y un porrón en miles de snaks y cajones de porrones a granel pienso: “¡Epa, este tipo es un carismático!”.
Más allá de lo místico que suene lo anterior, hay personas que creen que esto se puede hacer sin pasar por el supermarket (¡Ojito! Sacando a Jebús, por supuesto). Pues a estas personas hay que guiarlas ya que son como corderos sin pastor, como cardumen sin Nemo; y ante la existencia armónica del Yin y el Yang también hay personas con pasta de líder dispuestas a guiar a las otras desamparadas.
A estas últimas van dirigidos estos consejos. Sencillas reglas y condiciones que de seguirlas te podes podés armar sin drama una secta bien copada y vivir for ever de las hortalizas, los frutos del bosque y también de los demás.
Si hasta aquí les interesó lo anterior, aquí van los consejos nuevos hermanos:
- Tener pelo enrulado y largo o con permanente, garpa y mucho.
- Ser medio negrito o morocho, los rubios no tienen carisma de mover masas por ser tan sensuales.
- Andar siempre en desabillé, bata o de último recurso una salida de baño de toalla.
- Dejarse la barba a full o en su defecto todo afeitado. No sirve la barbita sexy porque eso no garpa, eso es para modelitos chetos.
- Tener la panza sanguchera (elíptica) o porronera (redonda). Jamás abdominales marcado porque resta credibilidad.
- Sonreír solo con la boca y dejar el resto de la cara inmóvil.
- Tener algún negocio turbio o cagador como por ejemplo venta de autos usados o distribución de merca (es para sostener a la comunidad en los meses de vacas flacas).
- Pelar un nombre hindú o relacionado a lo amoroso (por ejemplo: Sri Ragú Vidjujiva, Hermano Cariñoso, Maestro Tierno o similar).
- Tener una granja con animales de posta para los asados y los pucheros, pero lejos de la casa por la baranda a mierda que dejan estos animales.
- Practicar trucos de magia como levitación y mover cosas con la mente (mediante imanes como hacia el mago enmascarado).
Hermanos míos, el resto de la mística depende de ustedes, de formar y crear una hermandad basada en el amor y la fe. Y no olviden sobre todo ser cuidadosos en la admisión, pues hay muchos pobres dando vuelta.
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