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El manifiesto comunista según Nicolás Del Caño – Parte 2

Seguimos con el análisis sobre la sociedad en la que se encuentra Nico Del Caño, y en esta parte, (que nada tiene que ver con la primera) vamos a marcar más o menos las vicisitudes de la Izquierda provincial y nacional.

PARA LEER LA PARTE 1

El manifiesto comunista según Nicolás Del Caño

Cuando supimos de la existencia de este muchacho lo único que sabíamos es que venía de la izquierda, a varios de nosotros, en su momento, nos costaba distinguir cual… hay como 95 partidos de izquierda, es todo un despliegue. ¡Y es difícil distinguirlos! Todos los partidos de izquierda casi que tienen los mismos nombres: MST, PTS, PCR, ¿vieron? Son como las patentes. Todos se identifican con 3 letras y movilizan hasta 5 personas, como los autos.

Según él, militar en el partido de izquierda es diferente. Todos tienen ese prejuicio de que la izquierda es aburrida, y ¿saben qué? No es así. Tengo entendido de que Nicolás, antes de ser lo que hoy sabemos que es, un gil personalista, se juntaba con un par de hippies en la facultad de ciencias políticas los sábados a la tarde, y Nico llevaba una docena de facturas (en el fondo sabemos que es tan capitalista como el panadero que se las vendió). Siempre sobraban. Por eso se inclinó al pan relleno.

Eran lindas las reuniones, eran divertidas, tomaban cervezas, algunos tomaban vino… menos las armas, se tomaban de todo los chicos.

Después se separó de ese grupo de personas, hubo un par de desacuerdos con la línea general del partido, bah, con el otro pibe que llevaba los vinos en realidad. Y formó su propio partido dentro de la facultad. Era el Partido Obrero Postmoderno, y el Partido Obrero del Bombal también, donde manejo varias cosas, pero empezó a cambiar un poco la doctrina, no sabemos si fue un poco por la influencia del barrio.

Dejaron de leer a Karl Marx y empezaron a escuchar Babasonicos y a Cerati. Dejaron las marchas por el campus de la UNC para ir a bailar “marcha” a un boliche, (marcha entiéndase por música electrónica, los purretes no usan más la palabra marcha).

Después la cosa no funcionó, consideraron que el Bombal era un barrio imperialista, que se morfaba a otros barrios, onda Dalvian. Así que empezó a vender corbatas, o sea, el chabón de la izquierda, le vende corbatas a los de derecha.

Son medio malditos también los zurdos, vieron que ahora dicen que hay crisis en Estados Unidos, y la izquierda de Nico Del Caño esta como “Aajaja tienen crisis esos hijos de puta jajaj”. Unos giles, no se dan cuenta que nosotros nos vamos a hundir si ellos tienen una simple crisis, pero ellos se burlan, que es mejor que presentarse a laburar al bloque de concejales, si lo fueran. O sea, no se ponen a pensar en el prójimo, porque mírenlo de esta manera: seria jodido ser estadounidense y tener crisis, porque ¿A dónde se van a rajar? ¿Van a ir a México a laburar de empleadas domésticas? Si también son trabajadores los norteamericanos, ¿no iban por los derechos de los trabajadores y en contra de la precarización laboral? Igual, para Nicolás Del Caño es todo un tema hablar de Estados Unidos, porque hay un presidente negro (supuestamente, Nico está en contra del racismo y la xenofobia) en la casa blanca (lugar donde el imperialismo gesta lo peor del capitalismo fomentando sus propias crisis). O sea que ve un futuro gris. Siempre.

A veces me pongo a pensar que la izquierda ya no es lo que era, culpa de Nico Del Caño: en navidad salió, hizo un piquete y cortó un puente porque le habían dicho que no era un feriado religioso sino que era un  paro convocado por la burocracia católica. Medio raro todo. O sea, odia al capitalismo porque nunca recibió una caricia del mismo, porque sus papis malos no le regalaban nada para navidad (REAL).

Nicolás Del Caño odia casi todo:

  • El celular es de derecha. El teléfono fijo es de izquierda.
  • El bigote es de derecha. La barba es de izquierda. La barba candado es claramente neoliberal.
  • La cerveza es de derecha. El vino tinto es de la izquierda populista.
  • La letra cursiva es de derecha. La letra de imprenta es de izquierda progresista. La letra gótica es nazi.
  • La Cenicienta es de derecha. Caperucita Roja es de izquierda. Blancanieves y los Siete Enanitos también son de izquierda, con su pequeño sistema comunal de autogestión.
  • La cocaína es de derecha. La marihuana es de izquierda.
  • Las facturas son de derecha. El pan relleno es de izquierda.
  • Usar forro es de ultra derecha. Abortar es de izquierda progresista.
  • Tener OSEP es de derecha. Tener OSDE NEO es de hippie careta.

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“La fafa es de derecha. El faso es de izquierda.”

“Si llego al Congreso, de los 35.000 pesos que ganaré, voy a dejarme 5.000 y lo demás lo voy a donar, tengo que ser coherente con lo que hemos propuesto” eso dijo en el 2013, y hace poco nos enteramos de que Nico estaba comprando dólares. ¿Con $5000? No creo. Vemos que se viste con remeritas Lacoste, relojes Victorinox y pantalones de La Martina. Sus “donaciones sobrantes” obviamente fueron a parar a su publicidad de campaña, muy buena e impactante, sino no se explica cómo es que un candidato a intendente del FPV, como lo era Ilardo, recurra a cartelitos pete, y el candidato del FIT, Martin Baigorria, tenga una gran esquina de la gran puta de Publicidades Sarmiento.

Quiere tratar de copiar a Stalin, cuando su mandato se caracterizó por un autoritarismo con pocos escrúpulos y por su persecución hacia los opositores a su política, contrariando a Lenin. Es por eso, que los comunistas y socialistas seguidores de los principios originales de Marx dicen que la llamada Nueva Izquierda, autoproclamada como «progresista» “no es más que una nueva forma de neoliberalismo posmodernista” que pretende «reinventar» el capitalismo.

En cada paro nacional se reúnen diversas fuerzas, en algunos casos antagónicos. Sobre esto muchos se preguntan: ¿por qué la izquierda acepta marchar junto a los supuestos referentes de la «burocracia sindical? Porque han dejado de ser un partido político para pasar a ser una mera fuerza de choque.

Otro tema que apoya mucho Nicolás Del Caño es el aborto: las FEMINISTAS como Noelia Barbeito, presentaron la “Guía Técnica para la atención integral de los abortos no punibles”. Más que un proyecto de ley, con ese título da más para ser una guía de entendimiento para el hippie con OSDE.

Igual es medio raro todo, porque el fundamento que usan es que hay tantos machistas en Mendoza, que si una mujer no coge con vos, es una histérica. Si una mujer coge con vos pero usa pastillas anticonceptivas, es una puta. Si una mujer coge con vos, no se cuida y queda embarazada, es una manipuladora. Y si una mujer coge con vos, queda embarazada y después aborta, es porque tiene derecho sobre la wasca cruda que pasa a ser una vida más pero dentro de una bolsa de placenta.

Gracias a Nico, la izquierda ya no es lo que era.

Hasta la próxima.