/Le promete la puntita y queda embarazada de 8

Le promete la puntita y queda embarazada de 8

Hoy en día la sociedad está pasando por momentos muy duros, erectos. Todos tratamos de tomar ventajas de cualquier tipo de situación, simplemente por el hecho de mostrar que la tenemos más grande que cualquiera.

La confianza, o mejor dicho, desconfianza está a la orden del día. Ya no sabemos quién será el próximo que nos apoye la tararira en el hombro mientras viajamos en colectivo. Engaños, descaros, falsedades, mentiras y un centenar de cualidades salen a la luz, proveniente de desconocidos y de quién tenés a tu lado en este mismo momento.

Esta tristísima historia llegó a mis manos en horas de la madrugada. Tiene como protagonista a Paulo Elviro Tresaño Da Souza Du Nacimento, brasilero que se encontraba pasando unos días en la tierra del sol y del buen vino.

La damnificada, Yésica Maldonado, oriunda de La Puntilla, una noche como cualquier otra creyó haber conocido al amor de su vida, al morocho esbelto que siempre le quitó el sueño. En un par de segundos ese estereotipo estaba frente a sus ojos.

Todo empezó con un karaoke a dueto. Ambos cantaron con un gran júbilo “No soy obrero pero te abro la zanja”, “Controlame este chorizo” y “Si te agarro, tus pedos salen sin ruido”. A pesar de la obviedad, ella todavía no se daría cuenta de las verdaderas intenciones de Paulo Elviro Tresaño Da Souza Du Nacimento.

Al finalizar esta actuación, se habrían ido a tomar un par de tragos. Él se pidió “esperma de pitufo” y a ella le pidió “Ron con somnífero”.

“Ella se veía muy enamorada, dispuesta a dejarlo todo por el morocho grandote de cuerpo aceitado y abdominales marcados. Incluso escuché que le llamó a su madre diciéndole que se iba a vivir a Florianópolis para descansar y disfrutar de la tranquilidad de esa playa” nos contaba el barman, quien habría atendido a la feliz pareja.

Pudimos constatar los hechos gracias a que un conocido telo de la cuarta posee un sistema cerrado de video-cámara en todos los cuartos por una cuestión de seguridad. Cuando hablamos con el conserje esto nos contaba: “Pidieron 2 turnos seguidos, una botella de champagne, dos vasos largos, un labrador, dos mantelitos individuales, un mazo de cartas, dos jeringas sin aguja, un dvd de Cacho Garay en Mar del Plata, un frasco de cloroformo, 3 mts de soga, un bozal, una botella de aceite de girasol, pilas para el control remoto, un enano, un anciano de 80 años, una bicicleta fija y dos jabones. Lamentablemente esto último no lo teníamos. Jamás noté algo fuera de lo común, sino claramente hubiera alertado a la policía.”

A continuación el audio transcripto de esa noche. Debido a su alto contenido, cambiamos algunas palabras.

–          Peu fim gegamos, eu tenho o minicomponete como e ferro que echi puta.

–          Hay Paulo, no sé, pará, vamos despacio…

–          ¿Lentamente? Dale, vocë tem cara de tomar todo el mate

–          ¡Hay! ¡No seas desubicado!

–          – Hehe … é uma piada. Bem, olhe, relajémosno, tomar alguns copos de champanhe enquanto ese enano seu mira a nos…

–          .¿No querrás emborracharme para aprovecharte de mí?

–          Não, o champagne é sólo pra convencerchi a tomar essas pastillinas pra que eu despós pueda coleccionar latitas de gaseosa.

–          Jajaja, sos un plato Paulo. Bueno, a ver, juguemos a fondo blanco.

–          – Dá, Tire suas roupas al pisiño, dar …

–          ¡No! Ya te dije que soy una mina difícil. Bueno, listo. Ahora te toca a vos.

–          – Ok, eu tenho um ciclomotor con carrocería de hierro inteiro para você

–          ¡Hijo de puta! ¡Ponele nombre y mándalo a la primaria a eso! ¡En mi vida vi algo tan grande y venoso como esa parrilla para asado!

–          Bem, angora você vê … HooooOOOoooOOOo! Queu pedaço de sandalia con plataforma tem lá!

–          Hay, si, es de familia. Paulo, ¿no va a pasar nada ok?

–          Nada de bom, apenas a pontiña.

–          No.

–          Eu Dale.

–          Ok.

Luego de esto, comenzaron a sentirse casi 45 minutos de gemidos, ladridos, alarmas y otros ruidos.

Al día siguiente ella se despertó confundida en la cama de otro telo con un cartelito que decía:

Paulo nunca apareció. Ella no recordaba haber usado protección, por lo que de inmediato fue a comprar un test de embarazo, y ahí es cuando vió que estaba embarazada de 8.

Yésica está a la espera que Paco Pérez sea el padrino de los futuros mestizos.

También podes leer:
¿Cómo la pasa el mendocino frente al calor?

El año pasado escribíamos:
Quiso morir

ETIQUETAS: