Luego de una gira por los Estados Unidos del Norte de América, en donde disfrutó de litros y litros de cerveza de un sombrero sin siquiera mover sus gruesas manos para destapar la deliciosa bebida, el ingeniero Eduardo Minnado decidió encerrarse en su casa en Tupungato durante tres años y no ver la luz hasta no hacer realidad su proyecto.

Es ahora cuando nos trae a todos los mendocinos el «vinocasco«, un espectacular elemento para quienes quieren disfrutar de los placeres de esta bebida.

El «vinocasco» viene en diversas formas y tamaños, el la foto podemos apreciar el modelo básico, el cual va a tener un costo aproximado de $70. Pero también podemos conseguir por unos pesitos más el «vinocasco cuadruple«, el cual cuenta con dos pares de vasos, para hígados más resistentes, el «mexican vinocasco» conforma de gorro Mijicano, el «electro vinocasco» con luces para fiestas electrónicas, el «vinocasco 3d» con lentes 3d para ir al cine, el «vinocasco hori/verti» el cual se acomoda a la posición del usuario, para así poder degustar aún acostado o el poderoso «turbo vinocasco» que cuenta con un dispositivo a aire comprimido que permite expulsar la bebida a velocidades estrepitosas en la boca del degustador.

Según nos cuenta el Ingeniero, estuvo solo dos días de los tres años en inventar el casco, todo el otro tiempo se lo pasó probándolo. No era cuestión de traer a Mendoza un producto berreta.

El staffd el mendolotudo ya tiene el suyo, adquieralo en las mejores vinerias de Mendoza.