Bueno, antes que nada me quiero presentar y comentarles que utilizo este medio berreta para presentar mi candidatura y mi partido porque no me quedó un mango de la fortuna que tenía, me la farrié toda. Pero ya he aprendido y es hora de hacer las cosas bien. Así que presento mi candidatura en Mendoza, porque por lo que se ve, acá cualquiera puede ser gobernador, así que pensé… ¿Por qué no yo?

Mi nombre es Darth Vader, me pueden conocer porque actué en películas como Star Wars (haciendo de malo) o Miseria (haciendo de Dardo, el mendigo).

En mi vida gane muchísimo dinero y bueno… era un tipo con guita y minas, así que anduve muchos años por el lado oscuro de la fuerza. Andaba de arriba abajo con suripantas…

En mi adolescencia tuve una banda de rock que se llamaba “Los V-under”, tocábamos en Casa Usher y llegamos hasta Apeteco, pero bue… los vicios nos llevaron a la ruina.

Andaba con gatos famosos, de fiesta en fiesta, de bar en bar. Quemándome las neuronas y la guita. Siempre en el lado oscuro de la fuerza.

Me daba festines de morfi con “amigos” que solo me querían vivir la teka y tomar la merluza.

Y yo seguí con el escabeche y la partuza.

Fue entonces cuando hice la peor inversión de mi vida, me puse un bar. En ese antro de mala muerte se concertaron todos mis vicios. Fue mi ruina. Quedaba en pleno centro, cerca de Sopelssa.

Un día me estaba bañando y sonó el timbre ¡ups! ¿Gatos?…

¡No! Era el cartero que me dejaba una nota del Banco Nación. La leí y me dio cagadera.

Me quedé sin un mango, el banco se quedó con mi casa del Dalvian porque no garpé la hipoteca y me quitó la cupé porque la tenía prendada. Estaba en ruinas, me dejaron solo unas pilchas y la espada.

Hasta el cepillo de dientes de Luke se me llevaron.

Traté de ir a negociar con ellos, pero no me dieron ni cinco de bola. Pensar que antes vivía en una estrella solo para mí.

Volvía a andar en bondi, como en mi época de culillo. Maldtito 104.

Dormía en la lleca y cagaba en los baños públicos.

Se me fundió la espada que era lo único que me quedaba para empeñar, pero con el repuesto trucho que le puse no me daban ni dos mangos por ella.

Como de pibe era bueno para los deportes empecé a jugar en el Gueyma, a ver si caranchaba unos mangos, pero nada. Con $500 pesos no me alcanzaban ni para el Átomo Desinflamarte y las vendas. Para colmo me perdí un penal contra Murialdo.

Con los últimos mangos que me quedaban me compré una moto porque tenía un plan.

Con la moto me fui derechito a chorear en el Banco Nación, el mismo que me había confiscado mis bienes. No se como mierda, pero me chaparon en un toque. Me metieron en naca como dos años. Toque fondo y en la cárcel se encargaron de tocarme el recto con espadas de carne. Siempre me gustó probar los dos lados.

Pero era hora de probar el lado de la luz. Así que un día me inscribí en el templo de los Emangelistas del Challao. ¡Mansos lo Emangelistas! Tuve que empezar de abajo y pagar el derecho de piso, pero por suerte hallé mi camino. Eran mis años de “el último orejón del tarro”.

Con el tiempo, cientos de fieles comenzaron a seguirme. Mi filosofía era “que la fuerza te regañe”. Todos temían a esa frase.

Hasta que llegué a ser un referente de mi religión, como un ávatar.

Un día decidí conseguirme una buena mina, que me acompañe en mi nueva vida. Empecé a mirar revistas de chcias para conocer sobre los gustos de una “señora bien”

De a poco comencé a animarme a hablarles a las minas sin estar dado vuelta, duro o borracho. ¡Que difícil se me hacía!

Hasta que conocí a la Patricia, el gran amor de mi vida.

Me dediqué a mi familia y labores de la casa. La única “papa” que pelaba era la comestible. Posta. Una cañita al aire nunca hizo estragos.

Hasta que llegó el varoncito.

Acá lo vemos al Matías renegando en su primer día de clases en el Jardín “Malvaditos”

Años después armé “la parejita”.

A la Romina le encantan las motos, como al papá.

Ahora que tengo nuevamente guita y poder, quiero candidatearme como Gobernador por la ciudad de Mendoza. Mi partido es el PDV (Partido Darth Vader). Y como todos mis colegas hacen miles de propuestas absurdas, estúpidas, ridículas y que jamás van a cumplir (y cuando digo TODOS me refiero a TODOS, no solamente los feos). Les traigo las promesas mías que si o si voy a cumplir (sino me chupan la espada):

Concientizar a la población sobre el cuidado del agua: Quiero poner un acueducto desde el Pacífico hasta acá para chorearle agua a los chilotes. Ese tren trasandino que pretenden poner hace bocha es una falacia, mi caño va a ser posta, lo armamos rápido y vamos a tener bocha de agua, pero aún no se como sacarle el sabor a sal.. Acá salgo intentando, pero nada che.

Igualdad: Quiero una Mendoza para todos, donde nuestros niños crezcan en paz e igualdad, como esos negritos africanos que andan en bolitas felices y con pancita. Acá me saque una foto con un coloradito en Luján (si, me toqué el huevo), tenía unos ojos medios saltones. Matrimonio libre entre animales y gente o robots y gente o robots y animales, da igual.

Educación al palo: La educación en fundamental, voy a inaugurar dos o tres escuelas bien pulenta, con parlantes que pongan música y clases modernas donde se hable de sexo, drogas y rock and roll. ¡Ojo! Solo para prevenir a los chicos.

Lectura obligatoria: Quiero que todos se lean un libro por mes, para que sean más cultos. Y el que no, palo y a la bolsa. La bolsa no es “la bolsa” de merca ¡eh!, ¡ojo! No tomo más merca hace mucho. Los libros los pueden elegir pero no vale el de “Mi planta naranja lima”, ese me cagó la infancia

Mendoza limpia: regalaremos escobas y escobillones para que todos tengan los jardines impecables. Y si alguien lo tiene sucio, entre todos los vecinos le recogen la basura y se la tiran por la ventana al cochino asqueroso, hijueputa sucio de mierda.

Vacaciones pagas: Todos los mendocinos van a tener el mes de enero completo para irse a la cajeta y rascarse las gónadas. Va a cerrar el comercio y el Estado, mudándonos todos a Potrerillos o al Carrizal. Al que se lo vea en la calle de pantalones largos o traje se le va a propiciar un tremendo capacho con lluvia.

Legalización: Voy a legalizar el “rabanito”. No quiero que sea un negocio para algunos poderosos y los punteritos de cuarta se maten a balazos. Vamos a hacer el IDP (Instituto del Porro) donde se va a plantar la mejor yerba y se va a enseñar a todos como fumancharla correctamente. Así como los yanquis hicieron con el chupi. ¡Con una población drogada es un papazo gobernar!

Plazas nuevas: Renovar las plazas de los barrios para que los columpios sean de los niños y no de las parejitas promiscuas.

Motitos para todos: ¡vamos todos los motorratones al parque carajo! ¡Rompámosle la bolas a todos los giles que quieran hacer deporte y a los que estén parados con las novias comiendo changuchitos gritándoles “soooooociooooo” a él y “mammetaaaa” a la mina!

Embutidos, Frutas y verduras para todos: Les voy a obligar a los supermercados a entregar el 10% de lo que producen en embutidos, frutas y verduras a los carenciados. ¡Chupame la salchicha Disco!

Boliches cool: Voy a remodelar los boliches abandonados como Forum, para hacer lugares de joda nuevos y zarpados en descontrol. Van a salir 15 pe con dos tragos.

Bomberos zarpados: Dotación de clones guiados por El Gordo Valor para los bomberos de Lavalle.

Animalitos de Dios: Voy a proteger a los animales y a los perritos de ellos.

Espada dura: para los chorros y los sabandijas. Le voy a dar amplios poderes a la policía para que cague a palos a los chimbas y a los tránsfugas sin mucho que preguntar. Palo y después charlamos sobre derechos y zurdos.

Por esto y mucho más, vótenme… ¡que la fuerza los acompañe!