/No quiero ni a Macri ni a Cristina

No quiero ni a Macri ni a Cristina

Voy a desarrollar una idea que comencé como un posteo en Facebook. Vamos a simular una charla entre dos personas:

– Mi pareja es un desastre, me siento mal, no tenemos proyectos, no sabe valorarme, me trata mal, es una persona tóxica…

– Bueno, pero tu ex era peor, te pegaba y te cagaba con cualquiera.

¿Le darían esa respuesta como «consejo» a un amigo/a? Lo dudo.

La respuesta obvia sería:

Buscá otra persona, porque evidentemente o tenes mala suerte con las parejas, o te gusta que te traten mal.

Eso mismo pasa hoy con el gobierno. Si los criticás, sos Macrista gorila y facho. Y el argumento para defenderos es «Macri era peor», “¿Te imaginas cómo sería esto con Macri?”, “Macri también se la robó toda y no te vi quejándote” Básicamente comparan “la pareja” que hoy nos está haciendo sufrir con lo malo que era “tu ex”, como si eso sirviese de consuelo, como si nos merecemos estar al lado de una persona de mierda.

Por lo menos yo, cuando critico al gobierno actual, no lo hago porque me guste Macri, ya que éste me parece un inútil, tibio e igual de mafioso que los k (un «ladrón de guante blanco» se podría decir), sino porque el kirchnerismo, desde su nacimiento, me parece nefasto y siempre estuve en su contra (es una paja, pero si quieren archivo se los muestro).

Y una de las cosas que más bronca de da de Macri, es que tuvo en sus manos (y mediante el apoyo popular) la posibilidad histórica de cambiarle el rumbo al país y darle la estocada final al kircherismo, pero ya sea por tibieza (lo que dudo) o por conveniencia propia (lo que creo), el tipo hizo exactamente lo mismo que los k, solo que con ojos azules y se cagó en todos aquellos que vieron una esperanza en él.

¿Y porque no quiero a los k? Porque me parece una deformación espantosa del peronismo, basada en un populismo anacrónico, un gobierno de pseudo izquierda obsoleto a nivel mundial y una red encubierta de mafia que sólo ha buscado enriquecer ilícitamente (y para siempre) a sus miembros y se han enfocado en ser una máquina de fabricar pobres e ignorantes que al mismo sistema le conviene (dicho por un propio dirigente de la matanza). Y cuando me hablan de “pruebas” sobre el desfalco, “yo no las tengo, pero tampoco tengo dudas”, como dijo un amigo ultra k en una conversación íntima.

Yo, personalmente, no quiero que vuelva Macri, sino quiero que vuelva algo mejor que Macri y los K, quiero una pareja nueva, no quiero a la actual ni a la ex, no quiero que me sigan pegando, no quiero volver ni a lo malo conocido, quiero lo bueno por conocer. Me considero peronista, pero el peronismo aplicado de esta manera no funciona, no ha funcionado y no va a funcionar, porque es funcional a la idiosincrasia mafiosa del argentino. Claramente este sistema como forma política acá YA NO SE PUEDE APLICAR. Entonces no me puedo morir en la mía, sino que tengo que progresar, tengo que cambiar, tengo que darme cuenta de que “mi pareja actual y la ex son una mierda y debo elegir una nueva, quedarme solo o aceptar que me gusta que me traten mal”. No somos “panqueques” por cambiar la forma de pensar, es condición del ser humano buscar, encontrar, preguntarse y modificar los paradigmas. No puedo ser tan terco de darme cuenta que venimos queriendo hacer funcionar un sistema que no sirve para el país. Hoy los partidos conocidos, son herramientas para enriquecer a sus dirigentes, pero distan enormemente de ser instrumentos en pos del pueblo.

Y cuando me quejo, lo hago porque venimos en picada hace décadas, venimos mal desde la vuelta de la democracia (ni hablar antes), entonces no quiero más ni peronismo, ni radicalismo, ni cambiemos, ni izquierda, ni nada de lo actual, PORQUE ES EVIDENTE QUE NO FUNCIONA, no sirve, no camina. Y si algo no funciona, como en una pareja, hay que desprenderse o resignarse a que las cosas anden mal.

Y por lo menos yo, no me quiero resignar.

ETIQUETAS: