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¿Cómo sacarte de encima a un denso?

¿Nunca te pasó que fuiste simpática con un flaco y ahí nomás te quiso hacer un pibe?

Seguro muchas de las que leen, han sufrido o sufren, el asecho de algún hombre ilusionado. Te lo comiste en una de tus noches más olvidables y el flaco ya quiere casarse. En las juntadas de minas lo llaman “el denso” o “el mermo culiado ese”.

El flaco no te deja vivir, subís una foto, pone Me Gusta. Ponés una indirecta para otro tipo, pone me gusta. Te festeja los chistes, te manda emoticons por whatsap, y un millón de cosas para estar cerca tuyo. ¿Qué tengo que hacer para sacarme a este idiota de encima? Te preguntarás.

Les voy a tirar una puntita, pero para ser expertas en el asunto y repeler para siempre a ese chico que ya no te pinta, deberán leer mi último libro “Dejame de joder pesado re culiado”, donde explico cómo espantar a un hombre de forma no violenta.

El problema es que los hombres tenemos ese famoso dicho con el que nos tiramos aliento entre nosotros “Cuando una mina te dice que NO, es un SI oculto”. Una pelotudez enorme, optimista al extremo. Te invitan a salir, decís que no podés y para un hombre significa que tiene que seguir insistiendo. El secreto, y mi consejo para las chicas es que lo espanten poniendo a otro macho en el juego. Por ejemplo: en lugar de decir “No puedo” decile “No puedo salgo con alguien, gordo aliento a caca”.

Los hombres somos bien boludos y ni a gancho te captamos una indirecta, por eso cuando invitamos a una joven a salir un viernes por la noche y nos dicen (sutilmente)”No puedo, tengo que estudiar”, al instante pensamos, pobre mina, tiene que estudiar un viernes por la noche y yo de joda. Obvio que al otro día la ves etiquetada en cuanta foto hayan sacado en “Mendoza no duerme”. El hombre siempre va a creer que estás ocupada, antes que pensar que no tenés ni media onda con él, sábelo. Entonces, en lugar de ser tan cordial podrías darle una evasiva más del tipo: “No puedo salir con vos, porque hoy le toca al del Veloster con casa en Chile”.

Otro drama es que las minas son tan buenas que nos dicen “estoy confundida” para cortarnos, pero el hombre entiende el “estoy confundida” como que realmente estás confundida, boluda. Si en realidad no estás confundida y te gusta más el olor de los huevos de otro, o hay otro hombre que te hace reír y pasarla bien, andá de frente. Siempre que haya una mujer confundida, habrá un hombre cerca hasta que esa confusión se pase, o peor aun intentando de que cambies de opinión. Por eso recomiendo frases que no den tanto margen a malas interpretaciones, frases del tipo “Hace 3 semanas me estoy tirando a tu vecino, el de acá a la vuelta”, “No quiero estar sola, quiero transarme a varios flacos”, “No te soporto, decís muchas pelotudeces después de garchar”.

En mi libro recomiendo cosas para que él se aleje por su voluntad:

  • Tirate pedos bien ruidosos cuando estés en una cita. Si hay algo que a un macho cabrío no le gusta, son las mujeres que se tiran pedos en citas románticas.
  • Fuma mucho y hablale bien cerca, los hombres odiamos el aliento a Coco Basile. El Coco Basile no es sexy para los muchachos.
  • No te depiles cuando uses pantalones largos y llevatelo a la cama, cuando vea que “la mujer ideal” que persigue es pariente de chewaka se va a ir solito. A los hombres nos molesta tocar piernas como las nuestras.
  • Invitalo a cenar con tus viejos y decile que tenés un atraso. Los hombres odiamos los atrazos y las cenas con los suegros.
  • Hacelo pagar todo tres noches seguidas. Se va a dar cuenta que lo bueno sale caro y recién te va a volver a buscar a los 40 cuando esté forrado en guita. Al macho le gusta pagar, pero nos fundimos rápido.
  • Metete el dedo en el orto y haceselo oler. Los hombres odiamos oler culos ajenos.

Si quieren conocer más, deberán comprarlo y serán todas una vívoras a la hora de romper corazones de hombres…

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