
Cierta mañana, en mi segundo día de franco de la penitenciaria, una urgencia llegó inesperadamente, agarré el celular, la billetera y salí desde Coquimbito con destino al Hospital Carrillo de Las Heras. Como estábamos a fin de mes, no contaba con mucho efectivo, por no decir que no tenía un mango partido al medio, lo justo para comer ese día.
Recuerdo que era una mañana lluviosa y fría, y encaré el acceso este con velocidad pero precavido, habían internado a mi hermano el cual había sufrido un accidente en moto y lo llevaron a ese Nosocomio.
En fin, mi Renault doce break venia a no mas de 100 km/h, y casi llegando al puente de hierro en la localidad de Guaymallén, me topé con un control policial, que al ver mi renoleta, me hizo seña que me orillara. En ese momento no sabía si parar y seguir de largo o pararme a perder tiempo un rato, y en milésimas de segundos me decidí. Me paré.
-Buen día señor, me permitiría su licencia de conducir, tarjeta verde y último seguro pago?
-Buen día oficial, mire ando con una urgencia, tengo todo, ¿podría ser tan amable de hacer su control lo mas pronto posible? (explicándole lo de mi hermano).
Oficial – Quiere usted hacer mi trabajo?
-No..no lo tome a mal Oficial, es de vida o muerte, tengo a mi hermano internado y necesito se apure..nada mas.
-Mire amigo, deme los papeles y haga silencio, no es problema mio ese ok? descienda del vehículo.
A todo esto le paso los papeles, mientras me bajaba del auto, mojándome el pullover de lana, peor aún…no encontraba mi licencia de conducir, claro..por el apuro la habia dejado arriba de la mesa de mis suegros, y más problemas para mi…me había tocado un choto que se vé la mujer no le había dado el postre la noche anterior.
Oficial- Mirá pibe, sin carnet no te puedo dejar circular, voy a tener que retener el vehículo y hacerte una multa. Falta grave por andar sin permiso.
-Amigo, le respondí. Te juro que tengo la maldita licencia, seguramente se me quedó en casa… ¿sabés lo que es una urgencia?
-Hagamos una cosa pibe, fijate como lo solucionamos, no tengo ganas de cagar a nadie, pero si me tengo que poner en boludo, te hago la multa.
En ese momento, mi celular suena y para desgracia del policía, era mi vieja, la cual me decía llorando que mi hermano estaba bien, que solo habían sido unos raspones, que lo primero que pregunto mi hermano era por mi y que no me asustara.
No voy a describir lo que sentí en ese momento, rabia, alegría, ganas de matar al policía de una trompada o largarme a llorar. Por momentos el tiempo se detuvo, y miraba los autos pasar en cámara lenta, y miraba al uniformado con cara de 32 largo. En ese momento el sentimiento que llegó primero a mi cerebro caliente fue VENGANZA.
-Mire oficial, la vamos a hacer corta, déjeme que vaya al auto y vea que «hay» guiñándole un ojo.
-Bueno pibe, .fijate, yo sigo trabajando y vos te vas a ver a tu..que era? tu primo?
-No hay drama, le dije. Mientras me fuí hasta el auto.
En ese momento, agarré los últimos $100 mangos que tenia para la comida, anoté la numeración del billete sin que me viera el paco, y se lo di entremedio de los papeles de la póliza de seguros.
-Bueno, siga no más, vaya con cuidado pibe.
-Hasta luego oficial! (Cobani y la reconcha de tu vieja..pensé)
Ningún ir al Hospital, me fui directo a la comisaría y expuse el caso ante el coordinador de patrullaje. Rápidamente, nos fuimos hasta el control policial, en donde estaba este policía gordo, y lo llamaron. La cara de yuyo del milico al verme a mi y al coordinador, es indescriptible, no hay mayor sabor delicioso de la venganza hecha con justicia, le hicieron una requisa y le encontraron mas de $3500, algo inusual en un efectivo a esa altura del mes, y dentro de esos billetes, ¡estaba el moradito mio!
En estos casos le cabe una suspensión de 60 días sin goce de sueldo, y si se comprueba el hecho de falta a los deberes de funcionario público… calle. No es de pija lo que hice, pero a ese milico, no le calentaba si esa plata era para remedios, o en mi caso para comer.
A veces, estas cosas pasan a diario, yo estuve a punto de ser una víctima mas de la corrupción que nos afectan a los ciudadanos trabajadores, lo que correspondía, era retenerme el vehículo hasta yo traer y exhibir mi licencia, o que otra persona con carnet manejara mi auto, tan simple como eso.
Esta anécdota fué muy bien vista por mis pares penitenciarios y policías, e insto, a no caer en la cadena de avivadas, muchas veces nosotros mismos somos cómplices de estas acciones, y por no pagar una multa estando en falta, tranzamos con los corruptos, convirtiéndonos en uno mas de ellos, uno mas del sistema obsoleto que nos rige.
groso flaco! gente como vos, hace mucho contraste con los chantas con uniforme que se ve a diario en la calle en los últimos años. muy buena la idea de anotar el número del billete.
Te felicito! Haces muy bien en contar tu historia, das esperanza, no todos somos iguales. Espero que te brinden todo el apoyo que te mereces, saludos!
buenisimo muchas veces uno no sabe que hacer en esos casos, un conocido una vez grabo todo con el celular y le dijo que no le iba a dar un peso que le hiciera la multa pero que no le iba a dar plata, y lo dejaron irse, no les importa hacer su trabajo sino sacarte plata
Como tambien estan los que saben mentir muy bien ante la ley y quieren sacar ventaja de eso,hay corrupcion de ambos lados..es algo de dificil de acabar..
Querido Peni, relatos como éstos dan esperanza. Pero el primer paso para expulsar la corrupción de nuestra sociedad consiste en hacerse cargo de los errores que uno comete y asumir sus costos. Ese es el asunto más difícil de todos, porque, si hay algo que caracteriza a nosotros los argentinos, es que no nos hacemos ni cargo de nada. Saludos.
Muchas gracias, la avivada argentina es moneda corriente. Hagan lo mismo y saquemos a unos pocos que manchan el uniforme.
Muy bien,xq x policías inescrupulosos como ese los juzgan a todos x igual. Yo soy esposa de un uniformado,de conducta intachable,con una foja de servicio ejemplar,q se rompe el traste trabajando hace casi 20 años como policía y sacando adicionales xq el sueldo no alcanza…sin ensuciarse las manos se puede.
mi papa era policia ya fallecio hace tiempo , un buen tipo , de gran corazon imagino que entro a la policia en aquella epoca por que no tenia muchos mas recursos , quienes lo conocieron hablaron con cariño de mi viejo ,trabajaba haciendo adicionales , de tachero , mozo , yyy no se cuantas cosas mas para llevar el mango a la casa , epocas duras la de la dictadura …. nunca tuvimos mucho , siempre justo y un poco menos . Tambien era un chanta lindo , caminar por el centro era una tortura a su lado , por que lo conocian en todos lados , y en todos se paraba a saludar , imagino que cuando fallecio , se llevo lo puesto …….. dejo su bolsito con el que laburaba despues de jubilado , ……..me gusta pensar que se llevo todas las risas que causo , los abrazos que le dieron , el ser reconocido como un buen policia , un buen vecino , y un mejor padre . MI VIEJO ERA POLICIA , vivia en el barrio sanidad Don Carrillo , y la Rosita maestra criaron a tres hijos yo David uno de ellos …. hoy estoy en medio del campo en sta cruz … saludos y mi pequeño homenaje a los que laburan en la fuerza .
muy bien encapuchado! hay q sacar a esas ratas de la institución, es un 5% de toda la policia.
El jueves pasado a la noche choqué con un flaco que es policía. Al ratito cayeron como 5 flacos vestidos de policía, amigos de él, y uno me dice que arreglemos las cosas entre nosotros, que no llame a tránsito, porque como el otro auto venía por la principal yo tenía la culpa y no me convenía. Resultó que el pibe, que venía con las luces apagadas, no tenía seguro y ni carnet! Obviamente llamé al 911, llegó tránsito y le llevó e auto, me dio mucha felicidad porque no le pensaba dar ni 10 centavos a los truchos esos.
Vigilante.