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¿No les pasó alguna vez que conocen a alguien y en menos de 5 segundos se dan cuenta que tienen por lo menos a una persona en común? Y ojalá que les haya pasado a los 5 segundos y no a los 5 minutos después de contar cosas que sabemos que no son propias de nosotros, y después vivir con el miedo de pensar que puede o no corroborar estas mentiras con esa «X» persona.

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Si el mundo es un pañuelo, Mendoza es un cuarto de un papel glasé, de esos metalizados que eran mas copados.

Hace poco menos de un año, salió a la luz una teoría que, avalada por todo este tema de las redes sociales, demostraba que para llegar a cualquier persona del mundo, solo necesitabamos tener como máximo 6 contactos. Obviamente que después la suerte haría su trabajo. Más aún si luego de viajar por todo el mundo para conocer al Dalai Lama, justo ese dia se levantara con el pie izquierdo y no tuviera ganas de ver a nadie.

El efecto de este estudio en nuestra provincia se acorta casi a la mitad de las personas que tenemos en común con alguien. Algunos dicen que es debido a la cercanía con la cordillera. Otros que es por la gran sociabilidad de las personas que viven aquí. Otros por el gran conventillerismo que se vive día a día en estas tierras.

La cosa es que vos, ahí sentado, estás a dos puntos de separación de cualquier otro mendocino o cosa relacionada a ello. Si, si… CUALQUIER. Y si no nos creés te lo vamos a demostrar con simples ejemplos.