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3 empresas que me cagaron en el 2013

De por si no creo en el sistema que funciona cuando vos te quejás.

Entiendo que todos tenemos problemas y errores, pero también entiendo que en las grandes compañías existen varios supervisores que están para eso: revisar que las cosas salgan bien y si notan algún error, hacértelo saber y no esperar que vos te quejes para recién ahí comenzar a solucionar el inconveniente.

Les voy a contar 5 casos que me tocó vivir durante el 2013

Movistar

Es obvio que si de compañías de celular se trata, todas están al pié del cañón para cagarte de alguna forma u otra.

En mi caso particular pasó con Movistar y su servicio de internet móvil.

Problema: al tener el celular configurado solo para 3G, en los lugares que no tenía cobertura (la mayoría de Mendoza) el celular no respondía a nada on line. Entonces la solución era pasarlo al EDGE, pero el tema que se volvía hiper lento. Incluso muchas veces se pasaba al GSM y ahí no había forma de conectarse a nada.

Solución: ninguna. Las reiteradas veces que llamé optaron por hacerme un descuento del 20% en la tarifa de internet. Pero solo era válido por 3 meses, y al momento de concluir ya no había validez alguna de este descuento, entonces solo me queda por bancármela.

Estado actual: durante el día como máximo puedo usar un 20% de internet provisto por Movistar y me salvan las conexiones de wifi que andan abiertas por ahí.

Conclusión: si te cambiás de compañía es seguir lidiando con el mismo servicio de telefonía celular que rige en nuestro país.

ADT

Estas alarmas te las venden como la última genialidad tecnológica si de seguridad se trata. En el momento que se activa la alarma, llega a tu casa la policía, la ambulancia, el grupo Halcón y 3 especialistas del S.W.A.T. listos para salvarte.

Más allá de la exageración, no deja de ser un sistema de alarma moderno. El tema es su “engaña – pichanga” a la hora de vendértelo.

Problema: te dicen que hay una súper promoción en donde no te cobran la instalación y te dejan todo pipí cucú, sobre todo si accedés a pagar por débito. El tema que no verificaron es que ese sistema no les funciona muy bien que digamos. Entonces te cobran el primer mes en su sistema pero no hacen el cobro al banco, entonces vos te enterás al segundo mes cdo te llega la primer notificación del mes de mora. Llamás y te dicen que tenés que pagar un recargo por ese mes que no abonaste.

– ¿Cómo que no aboné?
– No señor, acá en el sistema me figura que no abonó.
– ¡Pero si lo tengo por débito automático!
– Y bueno señor, ud. cuando vio que no se lo descontamos debería haber venido personalmente a cambiar el sistema de cobro.
– ¡Pero elegí débito para no perder el tiempo en esas cosas!

Estado actual: renuncié al servicio teniendo que pagar el interés de mora por un mes más el segundo mes completo.

Conclusión: convivir dos meses con el sistema de alarma que no se banca su propio sistema administrativo.

Falabella

Esta empresa siempre se destacó por hacer algunas cosas bien y muchas cosas mal.

Partamos de la base que es una casa que realiza mejores descuentos a tarjetas externas o de bancos que a su propia CMR Falabella.

Más allá de eso, posee una gran tienda on line. Desde hace casi 5 años soy cliente y decidí hacer una compra on line “a ver qué onda”. La verdad que las rebajas y productos son bastante interesantes.  En fin, compré una remera por internet.

Problema: debía llegarme a los 15 días de la compra. Pasaron 15, 30, 45 días y nada. Decidí llamar y preguntar. Una sensual voz chilena del otro lado me dijo que el producto hacía casi un mes estaba en el depósito y que si no me llegó la notificación via mail, tendría que ir a ver si todavía está ahí. Fui al depósito y el producto ya no estaba. No estaba ahí, pero sí reflejado en mi factura con el cobro correspondiente a ese mes. Volví a llamar y ahora, una sensual voz porteña me dijo que tenía que pagar el monto pero descontándole el valor de esa cuota. Me pareció razonable. Pagué y me fui a mi casa. Pocos días después intento hacer una compra y la tarjeta me figuraba como “rechazada”. Al preguntar por qué me respondieron que fue causa de no pagar una factura por el valor completo de la misma.

Solución: perder más de una hora entre gestión y averiguar si era cierto, para que me descontaran el monto, pero no el cobro por la mora, ya que me vino reflejado en la factura del mes siguiente. Para esto tuve que volver a hacer todo lo mismo pero si o si tenía que pagar los gastos administrativos de ese mes ya que la factura (gracias a ese monto) fue generada.

Situación actual: renuncié a la tarjeta DMR Falabella.

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Como verán, pueden sonar situaciones muy comunes y habituales, pero ese es el problema, que ya las tomemos como tales, siendo que no debería ser así.

Se mofan de nosotros porque saben que son necesarias, y que si yo renuncio, a los pocos minutos tendrán un nuevo cliente que pague por sus “no servicios”.

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