Ladrones de bancos, delincuentes que actúan en banda, solos, pungas, violadores, homicidas, estafadores, arrebatadores, rastreros, cuatreros, delincuentes informáticos, homicidas casuales, maniáticos, locos, traficantes, secuestradores…dentro de una cárcel nos topamos con toda esa clase de gente, que en el 90% de los casos son culpables.

Ahora bien, vamos a dar un pequeño pero gran paso, para que ustedes tengan una noción de cómo trabajan los agentes de seguridad, encargados de la guarda y custodia de estas personas con problemas de convivencia, adaptación a la sociedad y a la misma actualidad que nos toca vivir a diario.

Principalmente se trata que los delincuentes primarios no sean por decir mezclados con los reincidentes, tampoco dentro de la medida de lo posible, alojar en forma separada, procesados de condenados.

Caminar dentro de un pabellón con presos conflictivos no es para nada fácil, y más aún cuando estos ya han sido condenados y están tapados en años, porqué digo esto y lo afirmo, ellos se amparan en los DDHH, por ende, hacen lo que quieren cuando quieren, si agreden a un penitenciario, pocas veces son identificados, y la respuesta de los que conducen es sencilla. Se identificó al agresor? causa,  y el milico de ART (Accidente Laboral) y a otra cosa.

Muchos de los internos que hoy en día tiene alojado el servicio Penitenciario de Mendoza vienen del Ex Cose, o correccional de menores, tienen prontuarios extensos con la justicia penal,  se conocen desde hacen años, cuando alcanzan su libertad, y si no se adaptan en su estadía carcelaria al régimen progresivo de la pena, arman bandas urbanas y se dedican ya a delitos mayores, como vemos en la televisión, asaltos a mano armada a empresas, a casas quintas, bancos, financieras, secuestros extorsivos por nombrar algunos.

Nosotros como sociedad tenemos que adaptarnos a tales cambios en lo que respecta a materia de delincuencia, un caso claro es el asesinato de Ángeles Rawson, a manos de supuestamente quien fuese el portero del edificio donde vivía con su familia. Un tipo común y corriente, amigo de su entorno y como un tío postizo para esta chica, a que apunto con esto, a que cualquier persona puede ser un posible delincuente, nadie sospechaba de este personaje, sin embargo las pruebas fueron cada vez más notorias y comprometedoras para Mangieri.

¿Qué se hace con este tipo de delincuentes dentro de una unidad carcelaria?

Obviamente al igual que los delitos de violación, o infanticidio tienen que ser aislados del resto de la población penal, para resguardar su integridad física. Sus horarios se aplicaran según el régimen de seguridad intramuros, es decir que solo tendrá 2 horas de recreo, por 22 de encierro en su celda, hasta que se adapte a otros pares y sus recreos puedan incrementarse hasta 6 horas diurnas todo el tiempo que sea necesario.

Para concluir, el Servicio Penitenciario de Mendoza, hace un esfuerzo inmenso en cuanto a seguridad, pese a la precariedad edilicia de muchos complejos, los efectivos ponen lo mejor de sí para poder brindar un servicio pleno, la realidad salta a la vista, respecto a años anteriores, en cuanto a muertes o fugas. Hay cosas que la sociedad desconoce, Dios creó al ser humano para ser libre, no para estar encerrado, estas personas tratan e idean todos los días como evadir la seguridad de nuestros penales, y se han detectados y neutralizado cientos de intentos de fugas que en los medios no son publicados, el trabajo de los penitenciarios es noble y ponemos lo que hay que poner a la hora de enfrentar tales sucesos. Los delincuentes son delincuentes, por ende están donde tienen que estar, porque nuestra justicia así lo determina, la seguridad la hacemos entre todos, sociedad, jueces, políticos y uniformados.