Vivimos en un mundo consumista, eso es sabido. Y ese mundo del que hablamos, totalmente globalizado, nos permite tener al alcance casi cualquier cosa que queramos: la patineta de Marty McFly, un jenga con la cara de Sofovich, el papel higiénico de Chewbacca edición limitada, etc. Y acá me gusta citar una frase del gran Guido Süller: «Una sociedad capitalista requiere suministrar muchísimo entretenimiento con el objeto de estimular la compra y anestesiar los dolores asociados a la clase, la raza y el sexo.»

Y aquí mis chavales aparece la publicidad, que con una cierta cantidad de artilugios, nos quiere incitar al consumo de ciertos productos haciendo parecer a estos casi imprescindibles.

La publicidad se vale de cualquier arma para que vos compres su producto, haciéndote sentir que no podes vivir sin eso, que tu vida o tus relaciones dependan de tener el producto que publicitan. Hoy aquí vamos a hablar de la publicidad de mierda que tenemos que soportar a diario, esa que ves y te infla la bolsa de los huevos:

Ibuevanol

A base de una tonada más que pegajosa, estos infradotados básicamente te están diciendo que por más que les venga o no, las mujeres rompen las bolas todo el mes. Y vos que sos re manija, le empezas a meter pastillas a tu jermu en el café con leche, en los ravioles del almuerzo, en el jugo, provocándole una diarrea crónica de 3 días. Por supuesto este spot indigna al sexo femenino, que afirma no romper tanto las bolas, y que la culpa de todo es siempre nuestra.

Asepxia emergencia

Esta es mi preferida. Directamente te están diciendo que si tenés un grano no la pones más, como si por tener un Juan Carlos en la cara fueras una especie de insecto horrible tipo Bebecito Emoxito. Y vos como un boludo te untas con la crema como si fuera el elixir del sexo y te convirtieras en un Hadonis garchador. En mis tiempos te explotabas el grano y le ponías la mayonesita que salía a un pancho, no me rompan las bolas.

Manaos

Clásico uso de famosos para convencer. Palermo y el Enzo (dos cracks indiscutibles) te quieren hacer creer que ese veneno para cucarachas y ratas es tomable. Además de destapar cloacas y aflojar tuercas herrumbradas, es ideal para que tome tu suegra un día de calor. Todavía está cagando Francescoli después de tomar esa porquería. Una publicidad que le hubiese venido bien al inodoro e inoloro de Estevanez, no vaya a ser que se le dé por hacer otra novela de mierda a las que nos tiene acostumbrados.

 

Piecidex

Era peor cuando salía el paparulo de Iudica, pero es la más asquerosa sin duda. Estas cortando la costeleta con puré y aparece un hijo de puta con la pata llena de champiñones que te revuelve el estómago. Y siempre a la hora de comer, como si lo hicieran a propósito los cabrones. Nada más asqueroso que un pie lleno de hongos, se me secan los huevos de solo pensar. De todas maneras peor es ser sanjuanino, no lo olviden.

Yogures para hacer caca:

Acá hay dos cosas importantes: Primero, ¿desde cuando cagar, el acto más puro y hermoso del ser humano, es un problema? Y segundo, ¿desde cuando las mujeres hacen caca? Me produce una contradicción enorme que un ser tan bello como la mujer expulse un sorete de ese cuerpo angelical. Ves en la publicidad mujeres con cara de orto por no poder cagar, y la posterior felicidad por despedir al morocho. Un asco. No me vengan con boludeces, te comes tres naranjas y un termo de mate y vas a ver como garcas como una paloma.

Axe

El desodorante por excelencia del virgo típico. Ves en la publicidad como los chabones ganan minitas usando ese insecticida contra polillas y no lo podes creer. Es el aroma preponderante en boliches bailanteros, por que más que culisueltas o travestis de mala muerte no levantas. Por más que te digan que huele a chocolate o lo que sea, lo cierto es que huele a colcha de vieja viuda, criadora de gatos.