/Los Argentinolotudos

Los Argentinolotudos

En estos últimos tiempos agitados que venimos viviendo, bahhh agitados… Para el argentino de pura cepa todos los tiempos son agitados. Nunca vivimos tranquilos ni en paz. Por suerte. Esa suerte que en principio pensamos que se la debemos a nuestros denostados políticos, pero bien en el fondo sabemos que ellos no son otra cosa que un claro reflejo de nuestra sociedad. Porque somos así bien argentos.

El argentino es una clara mezcolanza jodida de gaucho vagoneta, tano puteador y gallego borrachín. ¿Qué esperaban que saliera de eso compadres? ¿Un lord Danés respetuoso y amable? Nosotros somos argentinos señores, somos los mejores del mundo en casi todo. O no escuchaste eso tenemos a Messi, al Papa, a la reina de Holanda y exportamos científicos.

Hablando un poco de eso y en consideración a los últimos eventos de público conocimiento, somos un pueblo tan particular que idolatramos al máximo nivel de fanatismo a un futbolista como Lio Messi y a los 5 minutos, como no nos gustan los resultados del seleccionado nacional, lo crucificamos. Somos bárbaros boló. ¿Tenemos a la Pulga entendés? El compadre es lo mejor que se ha visto tocar una cancha de fútbol en la historia y nosotros los echamos del seleccionado y lo tildamos de pecho frío, eso si, bien calentitos en nuestra cama viendo el partido por tele. El pibe deja todo en el césped por la camiseta y juega prácticamente contra 11 rivales y como no ganó un mundial, lo comparamos con Maradona y decidimos detonarle la cabeza con nuestros comentarios, retándolo por no cantar el himno, como si todos nosotros lo cantáramos desde nuestras casas. ¡Impresionante!

Continuando con el deporte insignia de nuestra patria, debemos abordar el tema que lógicamente conecta con el anterior. El ídolo máximo de todos los tiempos: Diego Armando Maradona. Para muchos trascendió lo que podía llegar a lograr un futbolista dentro de una cancha por lo que sin dudarlo lo apodaron D10S. Una especie de divinidad terrenal deportiva falopera, que nos dio más alegrías de las que queremos reconocer. El mundo entero se rindió a sus pies una y otra vez y alrededor del globo nos conocen por el Diego. Incluso iglesias maradonianas existen, un fenómeno nunca visto con un deportista. Canciones, poemas, llantos, alegrías tatuajes, remeras, frases y un sinnúmero de souvenirs dedicados al más grande. ¿Qué hacemos nosotros? Lo criticamos por supuesto, hacemos un reality show de su vida, no le damos más privacidad y lo acusamos, juzgamos y condenamos todo en un mismo proceso, porque entendemos que así no se debe comportar un ex deportista y que no es ejemplo para las generaciones venideras. La última vez que chequeé a mis alrededores, ninguno podemos ser mucho ejemplo de nada que digamos y eso que no somos ni cerca los número uno del mundo en nada. ¡Impactante!

Para ir terminando con lo deportivo tenemos a Los Pumas y su famosa derrota digna. Ahora también compartida por el equipazo que juega en el Super Rugby llamado Jaguares. Los tipos hace una década no tenían un mango para armar un seleccionado decente, los jugadores eran amatuers, como sigue siendo el deporte en nuestro país. Los pobres huevones se van a jugar al exterior para ser las figuras en sus equipos y vienen sin pedir un peso a ponerse la celeste y blanca y dejarla roja de sangre y negra de tierra, para que nosotros automáticamente nos hagamos especialistas y analistas de un deporte que ni nos calienta y salgamos a pegarle a todo el grupo porque siempre están a punto de lograr algo a nivel internacional, pero no llegan. Venimos de un país sin tradición de rugby y perdemos por uno o dos puntos contra los mejores del mundo. Logramos gracias a Pichot competir en los mejores torneos del universo y aun así lo queremos mandar a freír churros a Juani Hernández y nos reímos de que siempre se quedan ahí. ¡Increíble!

Por otra parte seguimos siendo los más grosos, porque tenemos al más grande de todos, tenemos al Papa Francisco. Jorge Bergoglio dio el salto que ningún americano jamás había dado y se puso al frente de la institución más importante del mundo. El tipo es Papa y es Argentino. Obviamente que cuando fue electo salimos a festejar como si fuera un mundial y decidimos hacerlo ejemplo de todo lo que nos rodeaba al tiempo que le íbamos poniendo su nombre a todo lo que veíamos. Hasta ahí todo bien, pero como el tipo al principio se lo tildaba de haber estado con los milicos, saltaron todos los ultra K sin cerebro a reventarlo y a negarlo y al poco tiempo se dieron cuenta que ese pelotazo se les venía en contra y empezaron a usarlo en sus campañas políticas. Hasta que un día el Papa que nosotros pensábamos que estaba más con Macri que con los K, se dio vuelta y empezó a simpatizar con los procesados. Y es ahí que lógicamente salimos todos a reventarlo y hacer de eso un escarnio público, gastándolo en las redes sociales y cuestionando su autoridad moral por mandarle cariños a Milagros Sala y su integridad con la Fundación Scholas Ocurrentes. ¡Somos de otro planeta!

Siguiendo con la línea de los incuestionables cuestionados, tenemos a la reina Máxima de Holanda. Probablemente una de las reinas más queridas de Europa y sin dudas la figura más emblemática de la corona de Orange. Todas las mujeres argentinas se levantaron a las 6 de la matina a ver la boda de Máxima con el príncipe Guillermo. Toda una revelación para nuestro país contar con una Reina de una Casa Europea. ¿Y qué hacemos nosotros? La criticamos como corresponde. Cuando está gorda porque está gorda, cuando está flaca porque está enferma, que todavía no tiene un hijo varón para suceder en el trono, que el padre estaba vinculado con la dictadura, que venía de una familia acomodada, etc. ¡Alucinante!

Muchas de estas culpas -he escuchado hasta el hartazgo- se las echamos a los medios de comunicación y en especial al goma de Tinelli. El tipo es un genio a otro nivel. Logra paralizar las pantallas noche a noche haciendo siempre lo mismo. Explota la estupidez del argentino medio y las pocas ganas de pensar del proletariado cuando llega a su casa de su jornada laboral y les da circo berreta, sin contenido, chabacán, pero mide más puntos que nadie. Culos al aire, chistes repetidos y peleas fingidas hacen picar el raiting hasta lo más alto. Todos se hacen los intelectuales que no ven esas porquerías y terminan zapeando un poco y dejando un ratito a Tinelli, porque justo va fulanito y terminan enganchados con todo el programa. Lo culpan de pudrirle la cabeza a la gente pero no se pierden un solo programa de Show Match. Y para colmo después todos los programas de todos los canales terminan replicándolo y comiendo de lo mismo. ¡Gomazos!

Para continuar con la argentinidad al palo, no podemos dejar de rescatar al mal de todos los males en este país: sin dudas el Periodismo. No hay nada peor para el argentino promedio que el periodismo. Los tratan como lacras de la sociedad, peores que a los políticos e incluso que a los árbitros de fútbol. Se los acusa de traicioneros y gatafloros que soplan para donde va el viento. Oficialistas y de la corpo que defienden a capa y a espada al mejor postor. Tildados de traficantes de influencias y vendedores amarillistas de humo ajeno, los presentan como los mercenarios de la información. Igualmente nosotros como unos campeones estamos todo el día con el celu mirando el diario online. Llegamos a casa para poner TN o C5N de acuerdo a nuestras creencias políticas, nos hacemos carne de las opiniones de los periodistas y panelistas, mientras le damos el Martín Fierro de Oro a Lanata. ¡Somos incorregibles!

Y somos así, pensamos que un gol a los ingleses fue una venganza por lo de Malvinas, y que perder con los chilenos al fútbol es la peor desgracia del mundo porque los consideramos claramente inferiores en todo. Y Uruguay no es más que una provincia argentina y Bolivia sirve para mandarnos tipos que levanten la cosecha. Paraguay solo exporta mucamas y a los Brazucas les dedicamos mil canciones porque perdieron en el mundial contra Alemania. El resto de Sudamérica para nosotros no existe, salvo Venezuela para usarla de mal ejemplo. Nos cansamos de despotricar contra los yankees, pero apenas juntamos dos manguitos los cambiamos a dólares para ahorrar y si juntamos diez manguitos nos vamos de shopping a Miami.

¿Cómo no vamos a quejarnos? Si somos Opinólogos Profesionales, somos Ingenieros en Ramos Generales, sabemos de todo, opinamos de todo, criticamos todo, somos mejores que todos y aun así, acá estamos y acá vamos a seguir por mucho tiempo más, con nuestra idiosincrasia canchera y altanera. Y si te pregunto por Lázaro me vas a contestar con los Panamá Papers. Si te pregunto por el descenso a la B, me vas a contestar que son los más grandes. Y si no es por H ó por B es por J. Y claramente si no la ganamos la empatamos.

Y el mate es nuestro, al igual que el Dulce de Leche, el asado y el vino. Compartimos esos videos chotos de la gente ayudándose entre sí, nos rasgamos las vestiduras de la solidaridad con el prójimo y a la primera de cambio nos hacemos los dolobus para colarnos en la fila, porque al fin y al cabo más que argentinos… hace doscientos años ¡somos ARGENTINOLOTUDOS!

¡VIVA LA PATRIA CARAJO!

ETIQUETAS: