/El brillo de la oveja negra

El brillo de la oveja negra

El estreno de la película Joker (Guason en Hispanoamérica) impactó en los espectadores y críticos de manera muy significativa, no solo por la majestuosidad de la obra, si no también, por los efectos producidos en la psiquis del protagonista que fueron apareciendo con el desarrollo de la historia.

Un protagonista que fue condenado y señalado por ser diferente, por no ser como el común de la gente, por tener capacidades diferentes y de todas esas maneras de marginarlo sale mi conexión con el calificativo, bastante normal en nuestro país, de la famosa Oveja Negra.

Se suele catalogar de ese modo a las personas que son diferentes al resto, que por una u otra razón no encajan en el modelo a seguir marcado en los diferentes ámbitos de la sociedad, a los que se atreven a levantar la voz y dejan de seguir con el régimen establecido.

En la antigüedad la oveja negra se dejó de lado, se la marginó,  porque la lana que producía era menospreciada en comparación de  la oveja blanca. La blanca se pagaba mejor porque es más fácil para teñir, y se llegó al punto de que en lugares del mundo se comenzó a pagar por criar ovejas negras porque llegaron a poner en peligro de extinción la raza.

Volviendo al calificativo, estas personas consideradas «ovejas negras» por la sociedad, familias o cualquiera sea su entorno, en realidad son buscadores de caminos de liberación, son los que de pequeños buscaban revolucionar las creencias yendo contra la corriente de sus tradiciones, siendo criticados, juzgados e incluso rechazados por sus entornos.

Lo que no se menciona nunca es el efecto positivo que pueden causar estos en los demás. Este tipo de persona muchas veces repara, desintoxica y crea nuevos escenarios en los entornos donde las personas nos relacionamos.

Su rebeldía es tierra fértil, su locura es agua que nutre, su terquedad es nuevo aire, su apasionamiento es fuego que vuelve a encender el corazón de los ancestros.

¿Que traería nuevas experiencias si no fuera por ellos? ¿Quién marcará los nuevos horizontes si todos llegáramos hasta donde se dice que se debe? Si no fuera por estos rebeldes muchos de los sueños no realizados por generaciones anteriores quedarían enterrados. Cuando surge un buscador, es porque este encarna el deseo de todo un clan de salir de las repeticiones y lo conocido e ir hacia adelante.

En todos lados siempre hay un héroe, que eleva su conciencia y frena de alguna manera “que el agua sucia siga corriendo” hacia los que vendrán, termina con las repeticiones de los mandatos mal adoptados y los elimina o cambia de manera que causen un efecto positivo.

Ninguno de nosotros debería dudar de su naturaleza y de la identidad propia, esa “rareza” es muchas veces la flor más preciada del jardín, el sueño reprimido de nuestros antepasados y el brillo de la oveja negra.

ETIQUETAS: