“El ser humano es un virus” Agente Smith Matrix
El último rinoceronte blanco está rodeado de soldados cada uno con un FAL Tiene que ser así. Su carne, sus vísceras y su sangre son lo más valioso del planeta, tanto como lo es la mosca que ahora me mira fijo a los ojos desde el papel en el cual escribo. El axioma de que la vida es sagrada. Cuando los soldados se distraigan o los gobiernos se aburran, y los cazadores furtivos maten al rinoceronte, vamos a morir, porque estamos todos conectados. Nuestra respiración es sincrónica con las gotas de sudor de un león en la sabana; el latir del corazón de un pingüino se repite en la baba que cae de la boca de un oso cazando salmones. El concepto de Gaia es tan real como el sol o el amor. Según la hipótesis de Gaia, la atmósfera y la parte superficial (flora y fauna) del planeta Tierra se comportan como un todo coherente, como un enorme y total ser vivo.
Catarsis.
Una pelea de perros, pobres seres, entrenados para despedazar lo que se les ponga por delante –Colmillo blanco de Jack London es una apología sobre eso. Una corrida de toros, en donde los caballos de los lanceros y el pobre toro son torturados en una carnicería que se hace llamar arte -Hemingway, por Fiesta, te admiro a medias. Las peleas de gallos. Las carreras de galgos. La caza de ballenas por productos que en realidad se pueden conseguir de otra manera -No estamos en la época de Melville para alimentar lámparas con grasa de cetáceos. Los tapados de piel, vanidad llena de sangre. La matanza de delfines en Taiji (Japón) y en las Islas Feroe (Dinamarca). La matanza de focas en Canadá. Los alambres de púas puestos en los senderos que usan los guanacos en la montaña, para que queden dolorosamente enredados y sean presa fácil. Los encierros de Pamplona, en donde cientos de imbéciles se aprovechan del terror de los animales para declararse valientes. Y la lista sigue en forma tenebrosa.
Los zoológicos repletos de seres hacinados ansiosos de libertad, lejos de sus hogares. En qué cabeza cabe tener a un oso polar en un sitio en donde hacen 40°, con la solución estúpida de ponerle un aire acondicionado, pobre oso Arturo. A un tigre de Bengala desesperado por su selva (Pienso en un tigre dice Borges). Nene, nene, mirá que lindo el monito, el elefante con su trompita, como el de la canción. ¿Cuál es la excusa de la existencia de un zoo? Porque todo argumento esgrimido es endeble, la única explicación es la crueldad de el que tiene el poder, es enseñar a los niños que las atrocidades son normales.
La perra Laika es el paradigma del barbarismo científico, sí, una paradoja. Una perrita en el Sputnik 2, encerrada a miles de kilómetros de altura en un espacio más chico que una heladera, con una sentencia de muerte dictada en nombre de la ciencia. Monos, ratones, perros son torturados a cada segundo en este planeta en nombre de la salud, de los avances tecnológicos; me preguntarán qué usaríamos en cambio de animales para los experimentos. Utilicemos a presos por casos de violencia extrema, que sean ellos los que sirvan para saber si un champú de mierda sirve o te lastima los ojos, si un remedio puede contra el cáncer o un ataque al hígado.
Monsanto, Fukushima, Chernobyl, Three Mile Island, el canal Pescara, la tala asesina de la Amazonia, Hiroshima, Nagasaki, el vertimiento de los residuos industriales en todas partes del mundo, ir a un asado en Potrelliros y dejar una botella de plástico botada en el lecho del río, secar las lagunas de Guanacache. Le vamos dando la cicuta de nuestra idiotez a la Vida.
Según narra uno de los más grandes libros de ficción de la historia de la humanidad, un señor le dijo a Noé que hiciera un barco parecido al Titanic (sin que se hundiera) ya que se avecinaba una gran tormenta que dejaría todo bajo el agua. Luego de que el barco estuviese listo, que subiera una pareja de cada animal que existiese en la Tierra, o algo por el estilo. Pero este señor se olvidó de decirle a Noé que no subiese humanos, y así se hizo el Arca que no es. La verdadera Arca es la Tierra, sin personas. Gaia ha contraído un virus.
