No fue necesario esperar a encontrarnos en el club. Me llamó el Tano y nos encontramos en una heladería cerca de su casa.
-Antes que nada, Marcos, quiero que sepas que jamás tuve ninguna insinuación con la Elisa.
Yo lo miraba y lamía mi helado de chocolate granizado sin decir una palabra.
-Con los muchachos siempre comentamos lo fuerte que estaba la Elisa… Siempre lo dijimos, Marcos. Antes de que vos…
-Sí, Tano.
-Bueno, cuando te pasé el teléfono de la Elisa, yo lo tenía porque hacía tiempo que la quería llamar. Pero no me animaba. La verdad es que no me animaba.
-Y vos me decías que era un mariquita…
-Marcos, yo me calenté justamente porque te habías portado mal. Me calenté porque me gustaba la mina y vos que estabas en posición para hacer la jugada la pateaste afuera. Nada más que por eso. Y en el fondo… te admiraba. Yo no me había animado a llamarla. A todos nos daba un cagazo tremendo enfrentar a una mina que vive yendo a seminarios y sabe todos los por qué de las cosas. Pero cuando vino al club…
El tano hizo una pausa. Supe que dudaba de decirlo o no. Ya estaba empezando a darme un poco de asco el tipo este. Obviamente lo había idealizado, lo imaginaba diferente.
-…cuando vino al club nos dejaste con la boca abierta, Marcos. Nadie sabía que estabas de novio con la Elisa, y fue una patada en el estómago para mí. Yo tenía la esperanza de que se te pase el metejón con ella para pedirte permiso para llamarla, pero ninguno jamás pensó que te gustaba en serio, de que te gustaba para novia. Todos creíamos que te gustaba Teresita.
-¿Teresita? Y ¿por qué pensaban eso?
-Marcos, entre ustedes siempre hubo algo. Era evidente. La Tere cada vez que venía a la mesa hacía algo, te miraba, no sé. Cuando no venías, a la Tere había que ir a buscarla para que nos atienda.
-Pero… No sabía…
-Bueno, no sé, pero cuando dijiste que estabas de novio con Eli todos nos quedamos helados. Hasta la Tere…
-¿Cómo sabés que Teresita también?
-Porque al miércoles siguiente que no viniste, que jugó Tribilín, él fue el que nos hizo ver que la Tere tenía los ojos hinchados. Hinchados de llorar. Y el Cara de Luna la llamaba desde la cocina pero ella, ese miércoles… Ese miércoles casi no apareció.
-Pero ¿cómo nadie me dijo nada? ¡Qué manga de hijos de puta!
-¿Hijos de puta? ¡Vos te querías voltear a la Elisa, y un día estabas de novio con ella, y al otro querías recuperar –el Tano hizo como poniendo comillas con los dedos a la palabra “recuperar”—a la Tere, cuando ya la habíamos visto llorando por la despensa y para nosotros seguías de novio lo más bien!
Y el Tano empezó a cambiar su postura. Mutó su actitud, ni se dio cuenta. Algo se soltó dentro suyo.
-¡No sé si el hijo de puta, pero el pelotudo fuiste vos, Marcos! ¡Te la jugaste siempre callado y venías con una novedad, con otra, y nunca supimos qué carajo andabas buscando. Yo me tragué mis ganas de salir con Eli porque no sabía a dónde mierda estabas yendo. A mí me gustaba en serio y vos te la querías voltear. Y me la callé todo el tiempo, Marcos! ¡Todo el tiempo! Y sabés por qué me la callé, ¿no?
-Sí, Tano –dije casi sin modular.
-¿Sí? ¿Lo sabés?
-Sí, Tano. Porque respetaste el coraje que yo tuve… -hice una pausa para que siga él, pero no lo hizo- y que vos no tuviste.
-¡Totalmente! Me moría de ganas de decirte que me pasaba las noches pensando en mi… -se atragantó con un dardo de dolor y odio- mi morocha.
-Pará, Tano –le rogué.
No daba más. Me acababa de caer un piano de cola encima. Me sentía el tipo más miserable del mundo. Me lo imaginaba al Tano soñando con ir al cine con la Elisa mientras yo… No, no lo podía mirar a la cara, y lo que más me cortaba el aire es que el Tano se calló, no siguió vomitando su bronca. Se calló porque éramos dos tipos hechos mierda, y él podía entenderlo, podía procesarlo, podía dominarse. ¡Cuántas patadas en la cara me estaba perdonando! ¡Cuántas ganas de romperme la cara gastó sobre el pasto sintético! ¡Cuántas veces…!
-Tano, perdoname.
No lo miré, tampoco contestó. Estuvimos un rato en silencio hasta que giré la cabeza y vi su perfil triste, impotente. Enseguida me miró. No había odio contra mí. No, había impotencia. En sus ojos estaba la pregunta “por qué no se me dan las cosas, por qué siempre es tan difícil, por qué siempre viene de culo, por qué… por qué…”. Y por lo enrojecido de su mirada no noté sus lágrimas cayendo sobre sus pómulos oscuros. No vi las gotas bordear sus ojeras de tanto insomnio. No vi nada, nunca vi nada.
-Tano…, perdoname. Soy un pelotudo.
El Tano sonrió con amargura. Sonrió como quien siempre llega tarde.
-Sé que no lo hiciste de mal tipo, Marcos. Solo que jode… Jode porque no me gustó jugar el papel de forro. Pero me la banco por cagón. Así aprendí todo en la vida. Después. Después del puntazo aprendí a poner la mano. Siempre después…
El Tano no quiso que lo acompañe. “Dejá, voy a caminar un rato”, me dijo, pero lo corrí una cuadra cuando me di cuenta de que faltó algo en nuestra charla.
-¡Tano!
-¿Qué pasó?
-Tano, y ¿qué vas a hacer con la Elisa?
-¡Y nada…! No es la primera cosa que pierd…
-¡No seas tan pelotudo, Tano! Oíme, tal vez no podamos vernos más. Está claro. Yo estuve con la Elisa… –apenas dije eso se movió un poco hacia adentro la parte del abdomen la remera del Tano—pero, Tano, por favor…
-¿Por favor qué?
No lo podía decir. No me salían las palabras. No me salía de la boca.
-…por favor, llamala a la Elisa. No importa si funciona o no, pero ¡no te lleves ese muerto a todos tus almanaques! Tano, tratá, llamala… ¡Mierda, no me banco estar diciéndote esto, pero hacelo, pelotudo!
Y me di vuelta y me fui caminando rápido. Con un enojo un poco fingido, con una terrible confusión y mucha angustia. Mucha tristeza. No es que no nos íbamos a ver más porque yo lo había dicho. No nos íbamos a ver más porque el Tano ya no me iba a ver más. No sé con cuánto tiempo cicatriza tanta bronca, tanta impotencia, tanta frustración enfocada en mí.
Pasé por una plaza y me senté en un banco. Algo me estaba perforando el estómago y no sabía qué era. Ese trépano imparable había empezado cuando lo dejé al Tano por última vez. Respiré hondo un par de veces. Es que al final todos creyeron que yo estaba boludeando… Como lo empecé como un juego todos siempre creyeron que yo durante todo ese tiempo solo me quería coger a la Elisa. Pero ¿quién va a entender… quién va a entender que acá éramos dos haciendo lo mismo? ¿Quién va a comprender lo que me enseñó Teresita, si solo estábamos ella y yo? ¿O amar acaso es solo estar bien con alguien? Yo quería acostarme con Eli y ella… ella quería un novio. Eli no quería estar más sola. Me retumbaban las palabras de Teresita en el club, “O me cogés vos, o no me interesa, Marcos”.
Solo lo pude entender cuando la Tere se cansó de demostrarme que me quería. Solo ahí pude entender lo que es querer, lo que es tener… lo que es desear… lo que es amar… Y ahora lo vuelvo a ver, otra vez más, en la mirada del Tano. Otra vez aprendiendo. Y sonreí, sonreí con amargura. Sonreí como quien siempre llega tarde…
(Continuará…)
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Fue Foul: «Con la visa vencida»
El año pasado escribíamos:
hhhhhhhhhaaaaaaa papapappap!!! te cantaron la justa!!!!! ¿y ahora? a malgastar vidas a los garitos papa!!!!
Jajajaaa, un antes y un después de un granizado de Chocolate, debió haberse llamado este capítulo.
FUE FOUL. de todos, o de nadie; desde el principio o desde hace poco, la cosa es que fue foul.
Absolutamente, Confuego! Pero el réferi es ciego!! No cobra nada!!
Granizado de chocolate. Muchas lágrimas entre hombres. Muchas cosas no dichas en su debido momento entre… machos… … ¿Esta historia se pondrá a la moda de las historias de hoy en día? ¿A Traviata le dirán así por algo en especial?
Mentira Marcos, me gustó jaja. Eso sí, no me sorprendas más de lo necesario jaja.
Me encantan los anti héroes, Bestyal! jajajaa. ¿A quién no le gustan los helados? Cómo me gustan esas cosas! Y eso que no lo hice, como lo pensé al principio, que se juntaban en el atrio de una parroquia…
Jaja sos genial hijo de puta
yyyy Ahoraaaaaaaaaa!!!!??????….Donde te vas a meter Marcoss!!..Ya aprendiste mucho, es hora de poner en practica, aunque Marcos no pegas Una Man!!!!..ya renunciaste a Elisa y la entregaste con moño al Tano, pensas hacer lo mismo con Teresita??…a mi me paso lo mismo, te cuento el final???..
Johíta, a vos te pasó lo mismo? Entregaste muchacho o te entregaron??? Mandame un privado y contame el final de esa historia, por favor…
respecto al «chocolate granizado» no es mucho chocolate..no es mas de lo mismo?? mmm que goloso que sos !!!!
Sí, tal vez no me empalague fácilmente.
(Me debés una historia por privado vos…)
Hola, qué tal? Vi luz y entré.. Está historia me pone de la nuca, como me gusta.. Qué será de la vida de Marcos?! Cada vez que leo las historias, me imagino a la Tere y la Eli, como me gustaría tener una mujer como ellas, que aman de esa forma.. Creo que todos los hombres somos así de boludos, y al menos una vez metimos la pata.
Pobre el Tano.. Sigo pensando que Traviata es un mal co….
Qué mujeres, Iván! Un día, hace unas semanas, vi a la que me imagino como la Elisa. Era igual, el mismo pelo, la misma silueta, la cintura…, aunque vestida muy diferente. La vi de atrás. Cuánta mujer toda metida en un pantalón y una camisa!
Varias veces al ver a una mujer, en el centro quizás, recordé la exquisitez de estas mujeres.. Es verdad, mucha mujer para tan simples prendas..
Desde el capítulo anterior me esperaba eso del Tano aunque me esperaba una forreada. Ahora ¿Que onda Marquitos? Te cuesta decirle que llame a la Eli pero la queres a la Tere!? Que complicado estas hermano!
Que larga se hace la espera entre un capítulo y otro!
Abrazo Marquitos.
A Marcos le cuesta decirle que la llame, porque la quiso bien a la Eli. Porque la quiso más de la calentura inicial. Lo que pasa es que después le cayó la ficha de lo que es querer fuerte con la Tere y con el Tano. Pero le costó porque la quiso como sabía querer en ese momento.
Gracias por pasar siempre, Rorro!
Hayyyyyyyyyyyyyyyy Dió Mio!!!!! Tas en el punto justo de la encrucijada: o te definís por cagón y te sentás a lamerte las heridas, o haces de tripas corazón y salís a vivir la vida con los ojos más abiertos….. Valencia, cómo se está poniendo esto…Mucha reflexión y decisión, mucho desamor e incomprensión…. Sigo esperando el final feliz de este Gran Culebrón!!!
Saludos!!!!
Jajaja, me encanta tu tema del final feliz, MaryJo!!
Che y me salió con rima y todo ja!!! Me alegro que le guste… 😀
Buenísima locoooo! Me gustó mucho esta entrega hermano, y que feo perder así a un amigo, aunque parece que a Marcos mucho no le importó.
Genial Marcos, mis congratulaciones!
Chori querido!!!! Acá los amigos se vienen cayendo como los programas de Nicolás Repetto. Mal momento desayunarte de tanta cáscara en tan poco tiempo!
Como siempre un pedacito de obra maestra…
Se dará cuenta Marcos de que él es el pelot… antes de seguir pensando que los otros son los forros?
«No sé lo que quiero, pero lo quiero ya!»
Marcos lo que quiere ya es un descanso me parece, doctora. Qué bueno volver a encontrarla por acá!
Marcos es lo mas parecido a una mina q hay en el staff despues de bomur y conep 😛
Lo decís por el helado de chocolate granizado? Tenía razón Bestyal al final…
qué feo es sentirse así de pelotudo, así de gilazo…y para esos trances no hay mejor que un par de amigos, ahora la pregunta: querés seguir testeando amistades Marquitos????ya quedaron dos en el camino…Igual te la rebuscaste para sacar algo , una enseñanza, una lección. La puta que cuesta llevar los días adelante, bah, vivir que le dicen. Gracias de nuevo por el pedacito del puzzle que nos regalaste, genial!.
«La puta que cuesta llevar los días adelante». Qué buena frase, Pucho!! Che, vos me debés el resultado de tu propia puja entre una Tere y una Eli… No me olvido ni se me pasa…
nunca lei las otras partes de la historia..
ya me pongo a leerlas xqe esta me gusto!! jajaja..
saludos!! 🙂
Qué bueno, Ibis! Leyendo la historia completa es más interesante. Gracias!
la jodita le costo dos minas y dos amigos,, grande marcos,, un boludo barbaro,, q deje de agitar a sus amigos y que se replantee su situacion
Qué feo es que te caiga la ficha de que hiciste más de una boludez seguida, Flor. Más de tres boludeces seguidas, sos boludo, y Marcos no puede creer que cada cosa que pasa le sale para el orto!!!
Sí… algo deberá replantearse, Flor…
le sale para el orto?? él solito hace las cosas como el orto,, igual sabes que pasa tbn,, que los flaco son tan cerrados que despues lloran por no haber abierto la boca en su momento,, esto hablando no hubiera pasado,, pero buenoo,, mmmmm veremos que pasaaa ahora
Cuantas maneras tienen las personas de demostrar que quieren, que desean, que aman.. lo difícil es interpretarlas. Tal vez si les dedicáramos mas tiempo y atención..
Linda entrega Marcos, como siempre un placer leerte.
Yo quiero de Dulce de leche granizado y naranja
Me encanta tu mensaje, Rusa. Es difícil interpretar al otro. Pero es lo único que podemos hacer.
¿Por dos pesos más lo querés con cobertura de chocolate?
Si
El juego se llama libertad. Yo no culpo tanto a Marcos de lo que le ocurre; estuvo con Eli en su momento porque, como él mismo dice en los comentarios, se enrrolló con ella a la manera que sabía en ese momento; hasta que descubrió lo que sentía por la Tere. Cuando cambió de dirección, la Tere ya estaba en otra. Mala jugada, y a mascar bronca.Ninguno de sus amigos tiene nada para reprocharle; él jugó sus cartas en libertad sin saber nada de lo que sentían los otros y sin que ninguno le dijera nada, y ahora le pasan facturas. Forros. De Traviata, ni hablar.Excelente esta vuelta de rosca, Marcos.
Yo creo que aunque Traviata aparezca como el que rescató a los 33 mineros, va a seguir siendo un hijodeputa. Me parece. No me imagino una situación donde pueda levantar su cagada. Pero los demás… En una o en otra cosa, creo que a muchos nos pasó alguna «boludez» así.
Como bien lo decís, el juego se llama libertad. Y la única forma de perder en ese juego es no jugándolo.
Zippo, gracias por andar por acá!
Complicado el tema no… creo que le va a doler mas perder al amigo que a la mina…
realmente un placer seguir la historia semana a semana!!
Me parece que sí, Carjav… No se esperaba lo del Tano.
Gracias, hombre!
Por quéeeee!!!! Por quéeee no clavamos el Threesome cuando pudimos!!! ahora todos estos jeropas enamorándose perdidamente de nuestras sobras… jajajajajajjajaa!!!! Muy bueno como siempre Mark!
«…de nuestras sobras» jajajajaa, sos un grande, Genioo!!
Celso: si se hacía un trío, se terminaba la historia. Mejor sigamos así que está de puta madre.
como anda Don Messi!
dos cortitas y al pie….
una, porque siempre queremos lo que no tenemos? Tanto se ha escrito sobre el tema, tanto se ha hablado y sigue pasándonos a todos repetidas veces, quizás no se pueda aprender al respecto.
otra, con el diario del lunes todos tenemos la voz de Gardel, hay que juzgar a Marquitos sobre la marcha. En esta lo banco.
El amor y el sexo son de distinta jurisprudencia, no se puede elegir, hasta que como generalmente pasa, nos quedamos sin el pan y sin la torta. Sin mas.
abrazo estimado!
Don ruben no habra querido poner «jurisdiccion» ??
eso eso eso eso diría el chavo, capo total!
Lo sabia, sabia que el Tano se traia algo con la Eli. Pero bue, compleja la reflexion que tuviste y en futuro vas a tener. Saludos Marcos!