/Carta abierta a los hombres piropeadores: «¡Estamos hartas!»

Carta abierta a los hombres piropeadores: «¡Estamos hartas!»

 

Todos los seres humanos necesitamos sentirnos bien con nosotros mismos, y además nos gusta que los que nos rodean aprecien nuestra persona, constantemente buscamos nuestro bienestar a través de, entre otras cosas, nuestro propio ego. Con esto voy a que siempre buscamos estar lindos, aunque sea a nuestro propio gusto. 

Sin embargo, no necesitamos que todo el resto del universo aprecie nuestra belleza y nos lo haga saber.  Incluso, a veces, estas apreciaciones más que halagos terminan siendo desagradables, irritantes, y nos hacen querer mandar al observador a un campo de Auschwitz en 1944, o enterrarlo vivo bajo siete metros de tierra con abono de animales en un baldío donde nadie lo encuentre jamás. 

Creo que hablo en nombre de muchas mujeres cuando digo que, realmente estamos hartas. 

Hay un viejo dicho, que dice que el hombre propone… hombres, si quieren que una mujer disponga deberían aprender más de levante que de piropos. 

Se habrán dado cuenta que a veces les corremos la mirada, o los miramos con un profundo asco interno (sobre todo cuando nos damos cuenta que nos están mirando de antemano las tetas sin disimulo). Les cuento Adanes que esto es una señal que las Evas les enviamos para decirles que nos gustaría que se vayan a la puta madre que los parió, muy simple en realidad. 

Si tratan de ponerse en nuestro lugar, imaginen que los piropean mujeres de las que ustedes no quieren recibir piropos, estoy bastante segura que a un hombre le daría igual y hasta le daría gracia, aunque sea la vecina de 80 años en tanga y sin corpiño. También imaginen escuchar esto todos los días de su vida desde los 12 años, y si, ahí es cuando deberían entender que a los 21 ya te saturaron los ovarios, la hipófisis y hasta la médula ósea. 

Pero no todos son iguales muchachos, no se ofendan, algunas dedicatorias particulares: 

A los niños: esos locos bajitos que todavía, literalmente, “no saben ni hacerse una paja”. Mijito, haciendo señas obscenas  con su pene de 5×1 cm no produce nada más que lástima; ¿risa, excitación, miedo?, ni lo sueñes. Así que reservá tu dignidad, y no me propongas cojer, ni me amenaces con hacerme el orto, ni siquiera se te para todavía, ¿no te das cuenta? 

A las personas socialmente marginadas: “Mameeeeeeeta”, si fuera tu madre te hubiera abortado, adefesio humano. Aprendé a hablar antes de emitir una palabra. 

A los cancheros: “Hola linda/hermosa/bonita”, sí, no tiene nada malo esa frase, pero si se vieran en un espejo la cara de perversión que ponen cuando la dicen, se darían cuenta por qué los vacilamos y nunca respondemos. 

A las lesbianas: no todas, sólo las desubicadas, no les gusta que un hombre se les tire porque no quieren saber nada con él, bueno, yo no quiero saber nada con ustedes. Las respeto, como respeto a cualquier persona que me respeta a mí. 

A los señores mayores: personalmente, veo a los hombres que tienen edad suficiente como para ser mi padre como seres sin pito (a excepción de Brad Pitt). O sea, garchen, sean felices, disfruten de su sexualidad como quieran, pero a mí no me interesa saber de su pene, de sus relaciones sexuales, de sus gustos sexuales, nada señores. Está bien, a veces mujeres de mi edad corresponden las ganas a los señores y son libres de culiar con quien quieran, pero me parece una total desubicación demostrarle “afecto” a una chica que pudiendo ser tu hija no te demuestra nada a vos. 

A todos en general: ¿en qué puto lugar de sus cabezas existe la idea de que nos alegran el día diciéndonos lo que sea? 

En conclusión, hombres, si quieren mirar, háganlo pero con disimulo, los ojos están para eso y la cabeza para hacerse pajas mentales, pero entiendan una cosa: Nos gusta que la gente que queremos, con la que nos relacionamos, nos diga que estamos lindas, que algo nos queda bien, etc. Pero si no te conozco,  si no sos mi novio, mi amigo, mi primo, mi hermano, mi viejo, mi abuelo, mi tío, NO ME INTERESA  tu puta opinión sobre qué te parece mi culo, o lo linda que me veo hoy. RESPETEN eso.

 

Escrito por Andrea para la sección:

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