Hola ¿Crees en el amor a primera vista? Disculpa que te aborde distraída, no pude evitar mirarte y no animarme a hablarte. Me propuse conocerte, desentrañar lo que te interesa, saber que haces con tu tiempo libre, cocinar tu comida favorita, escuchar tus problemas, charlar horas por debajo del ritmo de nuestras bandas favoritas. Es algo súbito ¿no? Pero los leoninos somos así, queremos cumplir todas nuestras ambiciones.

No sos una chica normal, de hecho ser normal yo pienso que es catalogarse dentro de una masa y no como lo que seguramente seas. Tu delicadeza me dice que tu cabeza tiene mucho para decir, se nota en tus pequeños gestos femeninos idóneos. Quiero poder desgranar cada uno de tus intereses, tus fantasías eso que te hace única, forjar una historia memorable entre dos vidas seguramente con completas diferencias.

No me importa la manera de tu pelo,  quiero amanecer enredado en él, que sea la compañía de mis sueños, quiero limpiarte el rímel corrido por las lágrimas después de habernos reído por horas, de anécdotas, de apodos chotos que no nos gusten pero sean especiales e íntimos.

Busquemos ser la solución y no el motivo de problemas, que seas la inspiración de motivarme todos los días a mejorar y ofrecerte una buena vida a la par. Quiero que las peleas empiecen y terminen al mismo momento que el perdón no sea moneda corriente pero si el motivo de aprender. Quiero odiar a tus ex novios y celarte con cosas que creo que tienen que ver con ellos.

Entiendo que desconfíes de mí, un completo extraño. Esto no es algo que haga a menudo, la ocasión lo amerita, después de pasar segundos dudando si debía hablarte, elegí no dejar pasar la oportunidad. Mis ojos ya son imposibles de despegar de tus iris de miel, que el primer te amo se escape por accidente pero que sea sincero. Que me embobe tu perfume y el contorno de mis remeras en tu cuerpo que te queden gigantes. Vas a poder decirme lo que quieras, discutir trivialidades siempre acompañados por un buen argumento que desencadene una guerra de cosquillas para determinar quién tiene la razón. No voy a ser perfecto, de hecho no lo soy tengo millón de defectos encarnados en cada uno de mis poros. Pero prometo guardarlos bajo llave cuando salgan a flote.

Espero que me aceptes así, como un hombre que pone ante todo sus objetivos, aunque te haya tenido que meter en esta combi, y estés atada de pies a cabeza. Me hiciste correr mucho pero aún así te ves bonita.

Escrito por Ardoso Fagino