En estos momentos estoy realmente divagando por el terrible dolor de cabeza que tengo y siento que todo me está dando vueltas. No es que esté con resaca, sino que no tolero el calor de este infierno menduco. Aun así, en medio de la vorágine, se me vino a la mente una nueva idea para reflexionar y, de esta manera, mantener la concentración lejos de lo que me está haciendo sentir tan mal. Posta, parezco una cascara de banana tirada en el piso. No doy más, que clima de mierda que tenemos acá.
¿Viste esa campaña que dice algo del consumo problemático? Deberían hacer una para evitar el consumo del ex. De verdad, tanto yo como otros que veo dando vueltas por ahí, sufrimos una suerte de dependencia totalmente autodestructiva y despersonalizante, peor que cualquier droga legal e ilegal que puedas consumir. Hablo de esa necesidad de saber que está haciendo mi (o tu) ex. No calienta como fue, pero te peleaste, o te dejó, o bien fue “mutuo”. Pero por alguna razón sentís que necesitas de esta persona al lado tuyo, siendo una sensación equivalente a la que se produce cuando estas en el laburo y te querés fumar un pucho en el baño y sabés que no podés porque por ahí anda suelta la vieja loca que tenés de jefa.
¿De dónde nace la necesidad de saber qué es lo que hace tu ex? Quizás porque ya no podemos admitir que no estamos más juntos, que nos sentimos heridos y humillados porque nos dejó, o no sé bien por qué motivo. En sí, ya no estamos con esa persona. Y algunos entran en esa espiral de querer saber a toda costa como está nuestra contra parte luego de la ruptura. ¿Estará tan feliz como yo? ¿Me extrañará? ¿Estará saliendo con otra el muy conchudo?, etc. Miles son las preguntas que nos podemos llegar a realizar tarde o temprano. Puede que sea al principio, o bien ya luego de varios meses.
Admitilo, tarde o temprano el bicho puto que mató al gato también te va a picar. Cuando te des cuenta te vas a ver a vos mismo:
- Rrevisando si te bloqueó del Facebook o Twitter
- Agregando su número en Whatsapp para luego ver si está conectado/a y leer sus estados.
- Creando casualidades en la facultad para que se crucen.
- Revisando cuanta lista de nombre, fotos, estados, pelotudeces aparezcan por ahí para ver si está o no.
- Probando si cambió la contraseña de sus correos o cuentas en las redes sociales.
- Pidiendo a un amigo que te cuente cualquier cambio en las ya citadas redes.
- Preguntando a conocidos si saben algo del otro.
- Yendo a boliches a los que iban juntos.
- Fingiendo interés por su familia y te juntás a tomar mates con la vieja yegua que tenías de suegra.
- Revisando su basura a ver si tira algún forro usado.
- Parándote en la puerta del trabajo hasta la noche para ver si sale solo/a o con compañía.
- Estacionando el auto en frente de su casa para ver cuando llega, si va algún amigo, etc.
Yo creo que a todos nos pasa (no tan heavy) que queremos saber cómo está nuestro ex. El tema es que todo esto actúa como una droga súper adictiva. Conozco casos de personas que vuelven tan trastocada ésta actividad que sufren de una real adicción y se convierten en todos unos asechadores porque no pueden superar la ruptura de una relación. Peor es cuando la otra parte parece estar llevando una mejor vida que la que llevaba con nosotros.
Lo pasado pisado, tirado, esfumado. Ya es hora de recoger los miles de pedazos en los que tu corazón ha quedado y re armarlos para salir adelante. Nadie te va a devolver el tiempo que gastás pensando en personas que ya no están, ni las horas que pasás viendo que fue lo que hiciste mal. Es el momento de hacer la propia vida. De mirar hacia adelante, sonreir, capitalizar la experiencia pasada y listo. Ir hacia el futuro. Dicen que hay muchos peces en el mar. Y es así.
Lo mejor es terminar ya con esas actitudes, ponerle el pecho a las balas y salir adelante. Al igual que las drogas, el asecho hacia otros te mata.
Escrito por El Kayser para la sección:
los puntos son lo mas jjajajjajajaja, el del forro usado jajajajaja
Jajaja de una. Me imagino la situación de estar buscando y encontrar un forro usado. Y pensar en quien se esta garchando la yegua ésta. Que tristeza llegar a acechar a alguien de ese modo.
Muy buena nota, nos pasa a todos.A veces las ex se transforma en una especie de fantasma y creés verla entodos lados a la culiada. Pero no queda otra que salir adelante. Lo mejor que me dejó fue una gran cantidad de anécdotas junto a su flia, personas bizarras como esas en pocos lados. Me arrepiento de no haber registrado aunque sea con el celu las conversaciones y peleas de esa gente. Creo que si se los pasaba a ustedes podrían haber tenido contenido para el mendolotudo por un año.
Fantasma, verla en todos lados! A mi me pasó, pero me la cruzaba. Era real.
Tirate alguna anécdota, o animate a escribir algo.
Loco, me hiciste llorar…. lo peor es seguir intentando algo que ya no va más y que te persiga y que no te deje en paz, y que este con otra persona y te siga persiguiendo….