/Entrevista a Seba Valverde: el escribidor más sucio de Mendoza

Entrevista a Seba Valverde: el escribidor más sucio de Mendoza

¿No te cansás de escribir?

No. Cuando encuentre algo mejor que hacer, me pego un tiro.

¿Cómo empezaste 2019?

Con un ataque de pánico y con la noticia de que no voy a ser papá, de maravilla.

¿Qué te motivo a escribir «Puro Chamuyo», tu tercer libro?

Tenía insomnio y un síndrome de abstinencia fuerte, capaz por eso lo hice.

¿De qué trata Puro Chamuyo?

Es re simple, trata de un pibe como vos como yo, que saca un libro en pleno 2018. La historia narra lo que pasa de por medio, es una novela autobiográfica y es lo más polémico que he escrito hasta el momento. Es una continuación del Fuego Entre Las Sombras, el final había sido abierto y merecía un desenlace. Considero que escribo como el orto pero con el corazón y eso lo valoraron muchas personas. Hasta el día de hoy, siento que nada de lo que he escrito merece la pena y es lindo encontrar que te demuestren lo contrario.

¿Cuántos ejemplares vendiste de tu anterior libro?

Superé los cien vendidos, no me preguntés cómo lo hice, principalmente porque estaba muy ebrio o con la pera rota. Recuerdo muchísimas caras, realidades, historias y estaba mucho tiempo en la calle. Estuve en la puerta de la Feria del Libro de manera clandestina, trabajé en la Alameda, donde me lo pedían lo llevaba y recuerdo a muchos de mis lectores. Hubo un tipo que estuvo preso y me lo pidió de uno. Otro era un pibe que vivía en una plaza, se mantenía cuidando autos, ahorró todo el día y cayó al tablón en donde laburaba para pedirme el libro. Músicos zarpados o emergentes. Actores que no eran muy conocidos. Un pibe de Jujuy que le decían Chimuelo.  Me encontré con un loco con el que había sido socio de una flaca que nos rompió el corazón a los dos y actualmente somos manzos amigos. Estuvo re piola, desde 2016 la venía pasando como el ocote y en 2018 cambié totalmente mi suerte. El mundo, lo que pensás, el pasado o las circunstancias te puede hacer pija; la cosa es saber pararte y en ningún momento hacerte la vistima.

¿A qué crees que se debe tu éxito?

Soy terco. El «no» me lo han dicho desde que soy un guacho y soy impulsivo como pasional. También ansioso y entonces dije «bue, tengo una banda de defectos ¿cómo los uso a mi favor?». Ahí me mandé de una, empecé a patear, no tenía ni para el bondi, tampoco contactos y mi única compañía era un amigo de toda la vida. Después todo se fue a la mierda, era feliz y no me daba cuenta. Me llevó la policía, quisieron robarme varias veces, me la pasaba todo el día recorriendo Mierdoza y charlaba con personas de todo tipo. Para mí, no hay que romantizar el esfuerzo, si una persona se tiene que romper el orto para tener algo que sueña y otra se tira un pedo para lograrlo; estamos hablando de una desigualdad de oportunidades gigantesca y lo peor, que he conocido, es la gente que tiene oportunidades pero no les pinta aprovecharlas. Si tenés gita usala, tanto para disfrutar como para ponerte a hacer cosas zarpadas, no en pretender que sos humilde para evitar que te digan «cheto» o «careta». Sino decime ¿quién no quiere ganarse la lotería para no trabajar ni estudiar y pasar su vida de gira o como un rockstar o dándole cosas a las personas que amas?

Te pregunto siempre lo mismo: ¿Por qué sos polémico?

Porque quiero escribir hasta que me suiciden, ahoguen o fusilen. En el mejor de los casos terminar matando un chabón o consumiendo demasiada cocaína ¡VIVA ARGENTINA CARAJO!

¿Para escribir hay que estar mal?

No, hay que sentir. Todos nos hemos sentido mal y ahí caemos en la literatura. Pero para escribir hay que estar excitado, cansado, ebrio, contento o en cualquier estado. No tiene nada que ver, obvio que es más interesante leer al culiado que lo piso un camión, estuvo preso, le violaron al perro, le explotó el gato, el hermano nació con SIDA, se le cayó un testículo y tiene quince años y toda una vida por vivir.

¿Pensás en alguien cuando escribís y extrañás a alguien?

Sí, pero no va a leer, ni le importo. Si amás o querés a alguien, hay que darse cuenta cuando no te demuestra lo mismo. También es una cuestión de abrirse. Sea una amiga, chamuyín, familiar o lo que sea, llega un punto donde es sano soltar. Nunca fui posesivo y durante años me sentí como una mierda hasta que dije basta. Yo quiero demasiado y cuando me han dado pie, como no, he tratado de dar lo que nunca me dieron. Por eso cuando me voy de la vida de alguien intento creer que no me necesita y yo tampoco. Porque cuando madurás un toque, te deja de importar el físico o la belleza y más en cómo te trata igual que lo que hace por vos. Hay que ser pelotudo para querer a alguien que te complique la vida o no te de nada.

¿Por qué tildan de raros a los escritores?

Porque quien lo dice tiene raro el orto. Mostrá un poquito de empatía, que por eso nos va como el ojete, si tratáramos de ponernos más en el lugar de todos los demás en vez de juzgarlos, tendríamos más amigos como inclusión social que desigualdad o problemas. El problema del escritor es que debe digerir un montón de cine, música, teatro, literatura, filosofía y un montón de otras cosas, para poder volcarlas en palabras, libros, ensayos o historias. A parte tenemos que hablar de temas sociales pesados o que tengan relevancia. Por ende quien escribe debe ser auténtico y diferente.

¿Qué opinás del feminismo?

Yo las banco y suelo empatizar más con la mujer. Para mí está re bien que se hagan marchas, reclamen sus derechos, haya un potente cambio de conciencia, se escrache a un cuiadito, se legalice el aborto y se intente estabilizar la balanza. El problema recae en el fanatismo que puede conllevar, la falta de conocimientos sobre la historia del feminismo como las grandes filósofas y no saber el poder social que tienen. También tienen que tener en claro lo que es el patriarcado, ya que si se desea hacer una revolución, se tiene que tener totalmente en claro a qué te enfrentás, para tirarlo y levantar la sociedad con otros ideales. El feminismo para mí es el único cambio cultural que vale la pena y lo digo desde un punto de vista crítico. Lo que sí me molesta que varias de las que están en esas marchas tienen novios posesivos o siguen sufriendo por un chabón que no las ama o esperando que vuelva su ex con el que han llorado tanto… chicas media pila, no están solas y más si están unidas. No sufran por una pija que no lo vale. Si son hombres, no vayan a esas marchas, es una lucha de la mujer, ya que si un hombre heterosexual va es para levantar o chamuyar, he conocido a varios y no los voy a mandar al frente.

¿Y qué opinás de los hombres?

Que dolor de pija. El hombre está cagado, si no tenés auto, facha, gita, labia o lo que sea, no sos interesante, aún teniendo lo anterior le podés chupar un huevo a la que te gusta. Las personas somos sumamente superficiales, caprichosas y muchas veces doble cara. Incluso el patriarcado le mete el dedo en orto: salí a laburar, garchate minitas, mirá futbol, no llorés y mostrá que tan grandes tenés la bolas. Lo peor es si no sos así, porque te tildan de raro y a mí me han tildado así toda mi vida. Y acá me tenés, más virgo que la leche en polvo.

¿Cómo te va a en el amor?

A veces los gatos de los vecinos me piden comida, el perro se me murió.

¿Por qué habría que leer Puro Chamuyo?

No tenés por qué leerlo. Pero te voy a ser honesto. En el mundo de hoy, la mentira no se queda corta,  es horrible saber que por mentir podemos ganar y poner todo a nuestro favor. Ojo que es diferente chamuyar que cagar. Chamuyar es engañar, convencer o mentir, y esas han sido las tres cosas que me han ido dejando solo. Sale caro cumplir tus sueños, nadie dice cómo tenés que hacer las cosas y lo he hecho todo de manera independiente. Soy un escritor de culto o quizás no. Soy una persona o tal vez no. Capaz el libro es una ficción o algo que viví posta. Lo que es verdad y mentira lo selecciona cada uno. Pero si te sigo hablando vas a darte cuenta de que te estoy vendiendo humo y esa es la esencia del Puro Chamuyo.

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