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La sexualidad de los mendocinos

Hoy vamos a habar de la sexualidad de los mendocinos, según los resultados que arrojaron las encuestas realizadas por mí, sexólogo, deportólogo y enólogo Licenciado Alessandro Rampollo.

Debo reconocer que me han llamado poderosamente la atención ciertas cuestiones que no esperaba de una sociedad tan pacata y reprimida como la cuyana. De hecho, han sido tan excitantes los resultados, que cada dos por tres me tenía que ir a agasajar o sobornar a alguna buena amiga para que me venga a dar una mano. Tengo el pito como el yostik de un juego de aviones de tanto balancearme el amortiguador. Pero en fin… como siempre digo, a grandes resultados, grandes decorados. Después les muestro como quedó el rollo de cocina Susex (adecuado nombre si los hay para un artículo de limpieza erógena) y van a ver que nada tengo que envidiarle a un Picasso lácteo.

Antes que nada aclaro que quienes quieran ver y hacer mi encuesta sexual, pueden ingresar a la misma haciendo click ACA. Ahora vamos a los resultados antes de que se me despierte el amigo de nuevo…

Resultados de los hombres:

El 77% de los hombres mendocinos no han participado en un trío amoroso, generalmente eso no se debe a que ellos arruguen (porque lo demostraremos en otro resultado un par de párrafos más adelante) sino que ellas no se dejan. Así que les pedimos por favor, si lo que quieren es complacer a sus hombres, hagamos entre todos que el 23% de los afortunados seamos todos. Por lo menos inviten manga de hijos de puta, uno más no le hace mal a nadie.

Somos bastante degeneraditos, ya que si es por ponerla más del 60% no le haría asco a una prima. El dicho “primo primo te la arrimo” se cumple perfectamente en Cuyo.

A los mendocinos es obvio que nos gustan las tetonas, por ello casi el 40% prefiere acabarle en las tetas. Otra razón puede ser porque nos la aguantamos poquito y cuando viene la cosquillita y los tiritones no alcanzamos a darla vuelta o a depositar la manguera de cuero en otro lado.

Somos creativos e innovadores, por eso el 80% iría por detrás. Lo extraño es que el 20% diga que no… ¿son pelotudos o sus papás son hermanos?

He aquí la prueba de que los Menducos no le hacemos asco a los tríos, pero somos bastante maricones. Casi el 50% le entraría a dos minas de huevo, sin ningún aditivo ni público de más. Hay casi un 30% que no se la banca y se manda una pastilla y casi un 20% que se come el mazo. Si sumamos los pastilleros más los cagones resulta que casi el 50% pone excusas y da vueltas. Esto no es normal asexuados de mierda. Siempre es mejor estar con dos minas y quedar mal a estar con una y quedar como Cacho Castaña con treinta pirulos.

Respecto al beso negro queda demostrado que son las minas las que no nos dan todos los gustos pero que también somos bastante cagoncitos, ya que si bien al 44% no le pinta, hay un 26% que si y un 29% que le gustaría. Esto dice que al 55% le gustaría si nos dijeran que si.

Sobre la edad del desvirgue no hay mucho para hablar, casi el 60% la puso entre los 14 y los 18. O todos tienen muchísima suerte o las putas son millonarias, porque ponerla en Mendoza es más difícil que hacerle ganar a Jaque un concurso de belleza.

Bastante flojito el rendimientos sexual de los mendocinos. ¡No puede ser que el 40% tenga un record de 3 en una noche! ¿Han probado coger con amor o con una mina que les excite? ¡En toooooodaaaa una noche 3 polvos es demasiado poco! Falta training Mendoza, recomiendo tres series diarias de mancuerna violenta.

Estamos muy “cabeza a cabeza” respecto a las buenas tetas y el buen culo. El tema es que el 40% había elegido acabarles en las tetas… ¿Por qué no hay más gusto por las tetonas? Llego a la conclusión que es como dije anteriormente. Somos medios flojones y parece que no llegamos a darlas vuelta para acabarles, por ejemplo, en las nalgas.

Respecto a las preferencias ¡por fin levantamos algo de temperatura!… pero aún no da para que sea 100% de mi agrado (me hubiese gustado ver más de un 90% eligiendo lomo antes que cara, pero bue…). Hay un 33% que parece que tienen que internar a sus novias en un gimnasio, porque no saben de lo que el 77% está disfrutando.

Respecto a lo peor que te puede pasar, me pongo un poco contento, porque acá aflora la sensibilidad masculina. No por nada somos unos de los más caballeros del país. En iguales porcentajes nos mata que tenga olor a concha, que tenga pelos y que se ponga a llorar. Esto habla bien de nosotros, porque no a todos nos chupa todo un huevo.

¡Y por fin nos sinceramos! Se pueden quedar tranquilos y mirar de reojo al “culiandanga” del grupo, ya que sus mentiras tienen patas cortas. Al 55% de los menducos les ha fallado la pitina alguna vez, probablemente el más poronga sea el más falluto. Ojo con los pistolas.

¡Otra que me hace poner feliz! Suerte que el 50% de los mendocinos le entra al sexo oral, porque sería una lástima que le ganaran los otros porcentajes, aunque somos bastante exigentes, ya que el 40% la dudaría si se enfrenta a Tarzán.

Y si de poses hablamos, volvemos a la preferencia por los culos, ya que la pose del perrito es la que se lleva el 31%, seguido a lo dóciles que somos marcando con un 30% que ella se suba sobre nosotros (cagoncitos resultamos)

Conclusión: Nos hacemos los bananas pero a la hora de los bifes somos bastante maricones, nos pasamos horas y horas viendo pornografía, pero si de cochinadas se trata nos asexuamos y le buscamos las mil vueltas. Somos poco creativos y bastante impresionables. Nos la damos de machos bravíos pero todos tenemos “un muertito” debajo de la alfombra. Nos falta calentura, potencia y virilidad. En parte por culpa de lo difícil que es ponerla por estos pagos y en parte porque cuando tenemos la chance no le sacamos el jugo al 100%, ¿seremos tan histéricos como ellas acaso? Les aconsejo asegurarse un buen hueso y ponerla largo y seguido, con confianza y hambre de gol, con una mina que por lo menos nos excite y así entrenar varios meses seguidos sin contarle a todos nuestros amigos.

Resultados de las mujeres:

Entre las mujeres que han participado de un trío y a las que no, pero les gustaría llegamos al 40%… ¿Qué les está pasando a los hombrecitos menducos? ¡Chicas al poder!

Casi el 60% se garcharía a un amigo y el 24% talvez (esto es porque no tienen justo al momento de la encuesta ningún amigo digno). Si el 100% de los hombres se garcharían a una amiga, ¿Por qué no nos dejamos de mentir y festejamos el día del amigo más seguido? De “este” amigo con “esa” amiga.

¡Aguante el 44% que habilita dos puertas de ingreso! Y al 36% les digo… después no se quejen cuando vamos a las putas o nos la hacemos tirar por un travesti aburridas de mierda.

Respecto al lechazo, es espantoso que el 64% no deja que le acaben en la cara… ¿ustedes sabían que es el lugar sublime por naturaleza para el hombre? ¿Sabían que el semen no hace daño, ni es feo, ni hace mal? ¿Pueden ser tan boludas? ¿Han visto una porno en su vida? Chicas… venían tan bien hasta esta parte que me da bronca.

¡Que suerte que el 33% se deja hacer la cola! La verdad es que como puede haber un 67% que al menos no prueben. Hay que disfrutar más queridas…

Justamente entre los 16 y los 20 es cuando el 65% de la población femenina ha perdido la virginidad. Parece que arrancan de chiquitas pero la ponen poco y disperso.

Respecto a las acabadas por vez del hombre casi el 50% ha acabado un máximo de dos veces. Personalmente me parece un porcentaje muy alto para las pocas veces, pero… va en cada una.

Respecto al pingo, las chicas saben disfrutar, porque más del 80% entiende que lo gozoso está en los primeros centímetros de su chuchi, así que la prefieren gorda a larga.

En la pregunta sobre si al hombre no se le para, sale a flote la típica característica de la mujer mendocina, una mezcla entre mina pila y buena onda con una forra egoísta careta de mierda. Por esto casi el 40% le besuquea el amigo al amigo así levanta campamento (lo cual está perfecto) pero hay un 35% que lo ignora y solo pretende acabar ella, sin importarle la pareja (lo cual es un espanto).

Otra encuesta que va “cabeza a cabeza” es la que habla sobre las preferencias físicas. Un 47% prefiere uno bonito (en parte por las apariencias, pienso yo) y un 53% prefiere al pijón (entiende para que sirve un hombre al fin de cuentas).

Al 74% de las chicas les gusta que las “manejen”, pero al 30% de los hombres nos gusta que se suban sobre nosotros, o sea, que nos manden… después nos quejamos cuando los cordobeses o los porteños nos culian las minas…

Suerte que ellas prefieren la misma pose que nosotros, ya que el 40% prefiere estar ella arriba nuestro… no me queda claro si es porque mintieron en la pregunta anterior o porque sienten más arriba ellas (debido a que nuestro desempeño no es el mejorcito) y bue… tratan de pasarla lo mejor posible.

El 60% no se deja mientras está con la cosa, suerte que el 40% si y nos deja jugar al Drácula.

Muchachos, antes de pensar si se nos va o no a parar, mejor démonos una ducha, ya que para el 27% de las chicas lo peor que les puede pasar es que tengamos olor a pija.

Respecto al sexo oral, gracias a Dios solo el 9% de las mujeres son unas imbéciles.

Conclusión: La mujer mendocina es bastante frígida, poco “gauchita”, careta y poco creativa. Se está perdiendo cosas exquisitas del sexo, divertidas y excitantes. Sea por miedo, por falta de comunicación, por falta de información o porque los hombres somos un embole. Son poco abiertas, bastante reprimidas pero sorpresivamente el porcentaje de minas “distintas” es mucho más jugado y osado que el porcentaje de hombres “distintos”. Les aconsejo que sean más putas en la cama, lo de reina de la vendimia déjenlo de las sábanas para afuera.

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